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Junta y Ayuntamiento negocian con la fundación Francesca Thyssen exponer sus fondos en el C3A

Fachada del Centro de Creación Contemporánea de Andalucía (C3A), ubicado en Córdoba.

Juan Velasco

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La Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Córdoba están negociando con la fundación Thyssen-Bornemisza Art Contemporary (TBA21) la exhibición de parte de sus fondos de arte contemporáneo en el Centro de Creación Contemporánea de Andalucía (C3A), ubicado en Córdoba y dependiente del Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (CAAC).

Según ha podido saber este periódico por diversas fuentes, desde el pasado verano se han sucedido las negociaciones a tres bandas entre el Ayuntamiento, la Junta y la fundación que dirige Francesca Thyssen, hija del barón Heinrich Thyssen y que se dedica al mundo del arte, al igual que Carmen Cervera, vicepresidenta del patronato que dirige el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza.

Todas las fuentes consultadas coinciden en que el objetivo de las negociaciones es que la fundación TBA21 exponga algunos de sus fondos en el C3A. No se conocen más detalles de si la idea es que la exposición sea temporal o permanente, si bien se trata de un proyecto en el que hay alta implicación del Ayuntamiento de Córdoba, vía Alcaldía, a pesar de que el C3A es competencia de la Delegación de Cultura y Patrimonio de la Junta de Andalucía.

El alcalde de Córdoba, José María Bellido, ha repetido en diversas ocasiones que su modelo cultural museístico es el de Málaga, una ciudad que cuenta desde 2011 con el Museo Carmen Thyssen, una de las colecciones más importantes de pintura española y andaluza de los siglos XIX y XX. Nada que ver con los fondos de la fundación Francesca Thyssen, que comparte apellido con el museo de la baronesa, pero cuya colección es de una naturaleza totalmente distinta a los fondos expuestos en Málaga.

Por su parte, el C3A lleva desde abril sin coordinador, tras la finalización del contrato de Álvaro Rodríguez Fominaya, que acaba de obtener por concurso la plaza de director del Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León, el MUSAC. A pesar de la ausencia de dirección, este miércoles, el Gobierno Andaluz ha dado la sorpresa al incluir en el Presupuesto para 2022 la cantidad de 1.066.667 euros para este espacio. Se trata de una cantidad que triplica lo consignado en 2020, un año en el que el centro contó con 300.000 euros para toda la programación artística anual.

Preguntados por este proyecto tanto la Fundación Thyssen-Bornemisza Art Contemporary como el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo (del que depende el C3A de Córdoba), en ninguna de las dos instituciones se ha contestado al requerimiento de este periódico. Así que, por el momento, silencio sobre un proyecto que daría un giro de 180º al panorama del arte contemporáneo cordobés, que tiene en proyecto también la construcción de una nueva sala en las Caballerizas Reales, ésta ya propiedad exclusiva del Ayuntamiento de Córdoba.

La fundación Thyssen-Bornemisza Art Contemporary (TBA21)

Impulsada en 2002 por Francesca Thyssen-Bornemisza en Viena, la fundación Thyssen-Bornemisza Art Contemporary (TBA21) representa la cuarta generación del vínculo de la familia Thyssen con las artes y está especializado en proyectos de arte multidisciplinarios que desafían la categorización tradicional, incluidas instalaciones a gran escala, composiciones sonoras, actuaciones de resistencia y arquitectura contemporánea.

En este ámbito, cuenta con la Academia TBA21, un sitio itinerante de producción cultural e investigación transdisciplinar y que se concibió en 2011 como una plataforma móvil en los océanos, que reúne a artistas, investigadores y pensadores de diversos campos interesados ​en los problemas ecológicos, sociales y económicos más urgentes de la actualidad.

Desde septiembre de 2019, la fundación dispone de una oficina en Madrid. Desde entonces, los vínculos de Francesca Thyssen con Carmen Cervera se han estrechado, al igual que los vínculos con el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza, que se comprometió hace dos años a organizar dos exposiciones de la TBA21 al año. La última prueba fue la muestra After nature, una exposición inmersiva de la artista suiza Claudia Comte, inaugurada en mayo.

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