Suspendida para esta campaña la recogida nocturna en olivares superintensivos para proteger a las aves

La Dirección General de Política Forestal y Biodiversidad de la Consejería de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía ha emitido una resolución, que rige desde este próximo sábado 5 de octubre, en virtud de la cual se mantiene la suspensión en la temporada 2024/2025 de la recogida nocturna en olivares superintensivos para proteger a 66 especies de ave que anidan en estos cultivos.

En la citada resolución, publicada en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) consultado por Europa Press, se señala que se “suspende para un periodo de vigencia de un año desde la publicación de la presente resolución la recolección nocturna de aceituna de olivar en seto mediante el uso de cosechadoras cabalgantes entre la puesta de sol y la salida del mismo”, aunque con condiciones.

En primer lugar, “quedan exceptuadas --continúa el texto-- las parcelas de campo en las que se desarrollen proyectos técnicos puestos en marcha o autorizados por esta Consejería que evalúen posibles alternativas o métodos que pudieran hacer compatible esta práctica agraria con la conservación de la biodiversidad y de la avifauna en particular”.

Además, si como consecuencia de “futuros estudios específicos, se consiguen métodos suficientemente contrastados y seguros para evitar daños producidos por la cosecha nocturna en olivar de seto”, la resolución podrá quedar “sin efecto mediante otra resolución donde se contemple el uso obligatorio de otros métodos”.

Los estudios que se conocen hasta la fecha fueron realizados en 2019 por el Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera (Ifapa) a petición de la Secretaria General de Agricultura, Ganadería y Alimentación de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible. El proyecto se centró en la campaña de recogida de la aceituna de 2019/2020.

Como consecuencia del mismo se realizaron 44 controles de campo en 137 hectáreas y se avistaron 8.127 aves de 66 especies diferentes. Estos estudios, recoge la resolución de la Consejería de Sostenibilidad, “demuestran que los olivares en seto albergan una importante avifauna, similar en número de especies y cantidad a la de otros sistemas de cultivo de olivar tradicional”. “Este resultado es muy importante ya que permite poner en valor los nuevos sistemas de cultivo intensivo y en seto como hábitat de gran importancia desde el punto de vista de la avifauna”.

“Se determinó --concluye la resolución-- que la recolección nocturna en olivares en seto produce efectos negativos sobre determinadas especies de aves y que estos efectos no se han reducido con las medidas disuasorias que se han experimentado hasta ahora. En el 30% de la superficie controlada dichos efectos fueron nulos a muy bajos”.

No obstante, la Junta señala que, en caso de desarrollo de “tecnología apropiada”, se podrán realizar nuevos ensayos con los que evaluar si hay “alternativas o métodos que pudieran hacer compatible esta práctica agraria con la conservación de la biodiversidad y de la avifauna en particular para, en su caso, reconsiderar la suspensión de cosecha nocturna en olivar superintensivo y en setos”.

Tanto el acebuche como el olivo son ejemplares de los que se alimentan las aves insectívoras y todas ellas y “otras muchas especies --caso de las migratorias--”, los usan como dormideros. “En grandes regiones agrícolas, los olivares constituyen las únicas zonas arboladas que dan cobijo y resposo a numerosas especies de las aves silvestres”, apunta la resolución consultada.