Así será la base logística del Ejército: un proyecto “único en Europa” que operará a partir de 2026
“Lo que nosotros queremos no existe en Europa”. Los responsables del Ejército de Tierra han presentado este jueves en el salón de plenos del Ayuntamiento de Córdoba el proyecto para la construcción de la base logística que se construirá durante los próximos años en los terrenos de La Rinconada. El acto ha estado presidido por la propia ministra de Defensa, Margarita Robles, que antes ha visitado los terrenos en el que día en el que, además, se han aprobado definitivamente los convenios urbanísticos entre el Gobierno y la Gerencia Municipal de Urbanismo.
El proyecto de la base logística es una iniciativa del Ejército de Tierra para que “hagamos camino y no vayamos a remolque”, según explicó muy gráficamente el teniente general García de la Hija, durante la presentación. El objetivo es construir una base logística que esté funcionando ya en el año 2026, que se autoabastezca de energía, que esté repleta de sensores, que tenga su propio laboratorio, el taller de reparación y mantenimiento más grande de España, que funcione con tecnología 5G, con inteligencia artificial y que hasta pueda a llegar a prestar servicio para las fuerzas y cuerpos de Seguridad del Estado, o incluso para otros ejércitos de la OTAN.
El plan pasa por construir un complejo a unos 20 kilómetros de Córdoba que tenga de todo y en el que trabajen 1.600 personas adscritas al Ministerio de Defensa y muy especializadas. El proyecto responde a la iniciativa Fuerza 35. Bajo este nombre en clave está el objetivo del Ejército de llegar al año 2035 siendo una fuerza militar muy operativa a la vez que muy eficiente. Y por eso se ha planteado centralizar en Córdoba todo el mantenimiento de toda la mecánica y la tecnología del Ejército de Tierra.
De hecho, los militares ya usan un lenguaje más propio de otros sectores económicos. El teniente general ha hablado de un “hub logístico” donde se priorizará la “logística predictiva”, el big data, los algoritmos y la eficiencia. En resumen, el Ejército dedicará a 600 militares de carrera menos a labores de mantenimiento, que se harán de una manera más eficaz, inteligente y barata, y además pretende conseguir que la base logística llegue a ganar dinero, ya que se pretende dar servicio a otras fuerzas y fomentar en sus laboratorios otros sistemas de trabajo que también podrían acabar por exportarse.
“Esto no es sólo una infraestructura. La clave del éxito es el engarce del Ministerio de Defensa con la ciencia y la tecnología”, explicó el teniente general, que habló del “ángulo virtuoso” de la relación del Ejército con las empresas.
Durante la presentación del proyecto, los militares mostraron su enorme satisfacción por la ubicación final del proyecto, en una parcela “idónea” en las inmediaciones de Córdoba pero con autonomía. También se habló de plazos. Tanto este año como el siguiente el objetivo es culminar todo el papeleo y lograr la cesión de los terrenos. En breve está previsto que se inicie el primer estudio geotécnico y que se empiece a trabajar en el proyecto de obra. Así, se prevé que en 2023 puedan comenzar los trabajos, que concluirían en 2025. Al año siguiente se equiparían todos los edificios para que a finales del 2026 la base logística pueda abrir sus puertas.
El proyecto se divide en seis zonas en las que habrá un poco de todo. De hecho, está prevista hasta la construcción de un museo abierto al público en el que se expondrá todo el material usado por los militares en las últimas décadas.
Habrá varios lugares clave, como un centro de almacenamiento de 45.000 metros cuadrados con 150 trabajadores, donde primarán las nuevas tecnologías (visualmente será muy parecido a un almacén de Amazon) y un taller de mantenimiento de 100.000 metros cuadrados donde trabajarán unas 900 personas en hasta 90 puestos simultáneos. Eso sí, habrá una base secundaria para el mantenimiento de helicópteros en Colmenar Viejo, aunque la base dispondrá de su propio helipuerto.
“Será una base inteligente hipersensorizada”, detallaron, con conexión 5G y con inteligencia artificial.
A la presentación asistió el alcalde, José María Bellido, que agradeció a la ministra que “creíste en Córdoba” y dijo que “la ciudad está cumpliendo la misión”. “Tenemos todos los elementos que se requieren en esta primera fase aprobados y los acuerdos con propietarios para los terrenos”, expresó. “El compromiso es seguir dando todos los pasos necesarios a continuación”.
Por su parte, la ministra Margarita Robles destacó que la base “tiene nombre de Javier Varela, nuestro Jemed, que es quien la ha impulsado”, y aventuró que esta es “la primera de muchas más visitas”. “Cuando queremos hacer algo grande, todos sumamos. Este no es el proyecto de unos o de otros. Todos juntos sumamos y somos capaces de llegar al futuro”, insistió. “Vamos a seguir impulsando esto todos juntos. Esto no tiene color político. Todo lo que sea bueno para el Ejército es bueno para España”, concluyó.
La consejera de Fomento, Infraestructuras y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía, Marifrán Carazo, ha querido agradecer a la ministra de Defensa y al Ejército de Tierra la elección de Córdoba “para un proyecto de esta envergadura en lo que supone de modernidad y a la vanguardia, con ingredientes de inteligencia artificial, digitalización e innovación y eficiencia energética”, “claves para seguir construyendo Andalucía y generar nuevas oportunidades”. También ha añadido que el proyecto va a servir para asentar la presencia de las Fuerzas Armadas en Andalucía “de las que nos sentimos muy orgullosos, y cuentan con el cariño y el respeto de los cordobeses”.
El proyecto
El pasado mes de febrero, el Ministerio de Defensa optó por la ciudad de Córdoba como sede del Proyecto Tecnológico de la base logística del Ejército de Tierra. Su construcción, que supondrá un extraordinario impulso económico y social para la zona, será a su vez un motor tecnológico y de l+D+i para la región.
Se trata de un proyecto innovador en el que el Ejército de Tierra lleva 10 años trabajando para dotarse de un centro logístico con los más altos estándares tecnológicos. En él se agruparán las actividades de mantenimiento del material del Ejército en una sola instalación, reduciendo los tiempos de servicio, movimiento e infraestructuras. En definitiva, redundará en una optimización integral de la logística militar al más alto nivel, que será un motor tecnológico de creación de empleo en la región.
Otro aspecto muy destacable de este proyecto son las ventajas relacionadas con la eficiencia energética, gestión y aprovechamiento de residuos y la política medioambiental que permitirá reducir al mínimo el impacto de esta obra en la zona.
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