Adelante pregunta a la Junta por medidas de protección del lince tras hallar collares arrancados en Córdoba

La parlamentaria andaluza por Córdoba de Adelante Andalucía, Ana Naranjo, ha solicitado al Gobierno andaluz información sobre el hallazgo de transmisores de geolocalización en la provincia cordobesa que, supuestamente, habrían sido arrancados a linces ibéricos reintroducidos en el medio natural.

En concreto, la diputada andaluza ha registrado una pregunta con ruego de respuesta oral en comisión en la que pide saber las medidas adoptadas en apoyo a la investigación puesta en marcha por el Seprona, y las actuaciones previstas por el Gobierno andaluz para garantizar la protección de los linces y evitar que casos como los que se investigan vuelvan a ocurrir.

Naranjo se ha referido al reciente hallazgo de al menos dos collares con geolocalizador en las cercanías de Adamuz y Montoro, “episodios que han sembrado la duda sobre la posibilidad de que hayan sido arrancados por la mano humana”.

La diputada andaluza ha recordado que “no es la primera vez que esto sucede, tal y como han denunciado en sucesivas ocasiones organizaciones ecologistas, que alertan de los conflictos que pueden surgir con la reintroducción del lince en zonas pobladas, especialmente donde hay granjas de gallinas, en un contexto en el que la población de conejos, principal alimento de esta especie, se encuentra muy mermada”.

En este sentido, Naranjo ha señalado que “el Gobierno andaluz, como administración competente en materia de Medio Ambiente, tiene que articular cuantas medidas sean necesarias para mediar en esos posibles conflictos y garantizar la protección de una especie amenazada como es el lince ibérico”.

Lo contrario, según ha avisado Naranjo, sería “tirar por tierra la labor realizada en defensa de esta especie, única en todo el mundo, y dar pasos hacia atrás en concienciación en torno a la importancia de cuidarla”.

Naranjo quiere la “implicación decidida” del Gobierno andaluz para seguir contribuyendo a la recuperación de las poblaciones de especies amenazadas, ya que “afortunadamente hemos logrado sacar al lince de los índices de riesgo máximo de extinción, pero no podemos contentarnos con eso y dar por terminado el trabajo”.

Por ello, exige “la sensibilidad que corresponde a una administración pública, que debe velar por la protección de la biodiversidad de su tierra”, algo que hace extensivo a la protección del lobo ibérico tras la “decepcionante” postura del Gobierno andaluz de PP y Cs, que “intentaron sin éxito torpedear la propuesta del Ministerio de Transición Ecológica de incorporar al lobo al Listado de Especies en Régimen de Protección Especial”.