La abstención del PSOE en la Diputación vuelve a salvar al PP de Vox

En el año 2020, el PP gobernaba en minoría el Ayuntamiento de Córdoba. Había firmado un pacto de gobierno con Ciudadanos y otro de gobernabilidad con Vox. Los primeros se integraron en el equipo de gobierno. Los segundos se comprometieron a apoyar o al menos no bloquear la acción de gobierno, como la aprobación de presupuestos municipales y ordenanzas fiscales. Pero en aquel ejercicio Vox anunció que votaría en contra de los presupuestos del equipo de José María Bellido como alcalde y de Salvador Fuentes como teniente de alcalde de Hacienda. En en último momento, el PSOE anunció que se abstenía para evitar que el Ayuntamiento careciera de presupuestos y que el “chantaje” de Vox hiciera a los populares caer en cesiones ideológicas.

Ahora, en febrero de 2024, seis años después la historia se vuelve a repetir. Entonces, las negociaciones del PSOE las encabezó el concejal José Antonio Romero. Ahora, las vuelve a llevar a cabo, como portavoz del PSOE en la Diputación de Córdoba. El presidente de la institución provincial es el mismo que en 2018 era teniente de alcalde de Hacienda. Incluso hay actores que se repiten, como Paula Badanelli, concejala de Vox y ahora presidenta provincial del partido en Córdoba.

Este miércoles, en la Comisión Provincial de Hacienda de la Diputación, el PSOE anunció que en el Pleno de la próxima semana se abstendría en la votación sobre los presupuestos. Vox ya había amagado el día de antes con votar en contra. De hecho, la formación llegó a enviar, por error, una nota de prensa anunciando su voto en contra, que posteriormente embargó. El motivo está en que el presupuesto es muy parecido al que presentó el PSOE en su último año de mandato en la Diputación. Y en esencia, las cuentas no cambian tanto. No desaparecen las partidas a la memoria histórica (aunque mengua una parte) ni tampoco a Igualdad, donde hay 20.000 euros que salen de un punto para dedicarlo a cursos de formación.

Los presupuestos de la Diputación son esenciales para los ayuntamientos de la provincia. Los alcaldes y alcaldesas dependen de su aprobación para poder elaborar los suyos. Algo tan simple como saber los ingresos que van a percibir desde la Diputación es clave para poder diseñar sus propias cuentas en tiempo y forma. Los socialistas siguen conservando un gran poder municipal y querían desbloquear un asunto que preocupaba, y mucho, a alcaldes y alcaldesas de todas las ideologías en la provincia.

Salvar a Emproacsa

Pero estos presupuestos son esenciales también para salvar a la empresa provincial Aguas de Córdoba, en causa de disolución por grandes pérdidas provocadas, entre otras cosas, por el enorme esfuerzo presupuestario que se está realizando para garantizar que haya agua en el norte de la provincia y con el objetivo de lograr potabilizarla. Cada mes Emproacsa se gasta casi un cuarto de millón de euros en bombear agua desde La Colada hasta Sierra Boyera.

Aparte, la empresa provincial de residuos de Córdoba Epremasa también necesita disponer de unos presupuestos para garantizar el abono de un impuesto estatal sobre vertidos, que de lo contrario tendría que asumir con deuda y aumentando su déficit.

Ahora, el trámite se acelera. El proyecto de presupuestos se votará el próximo miércoles en el Palacio de la Merced. Y será definitivo dentro de un mes. Pero mientras tanto, los alcaldes de la provincia pueden ir diseñando e incluso aprobando sus propios presupuestos, con el objetivo de no retrasarlos más para que no perjudiquen el nivel de ejecución a final de año. Es decir, poder gastar la mayor parte de lo previsto.

Como en 2018, el PSOE salva al PP de Vox, que cuando vota en contra finalmente no tumba una iniciativa popular. En 2024, los populares solo tienen a Vox de socio preferente en la Diputación. En el Ayuntamiento, Bellido gobierna con una amplia mayoría absoluta y ya no tiene que negociar los presupuestos con nadie.