La plantilla de Carbonell reclama información sobre su futuro

Los trabajadores quieren saber qué va a pasar con la fábrica y cómo les afecta producir para Ybarra

La plantilla de Carbonell quiere saber qué va a pasar con la fábrica y cómo les afecta producir para Ybarra y acabar de una vez por todas con la incertidumbre que genera la falta de información que el Grupo Deóleo, propietario de la planta de Alcolea, viene manteniendo desde hace meses sin aclarar los rumores que asaltan los medios de comunicación sobre una posible venta o alquiler de la histórica fábrica cordobesa, que recientemente celebraba su 150 aniversario.

De hecho, explica el comité de empresa, no se sabe nada del plan estratégico presentado al Consejo de Administración en enero de este año ni de cómo va a afectar a los 150 trabajadores y trabajadoras de la factoría cordobesa y sólo tras múltiples requerimientos la Dirección de la empresa emitió un breve comunicado en agosto el que informaba de que se había alcanzado un acuerdo con Ybarra para el envasado de aceite.

Ha sido necesario más de un mes de solicitudes por escrito y verbalmente para que la Dirección de la empresa se comprometiera esta misma semana a hacer llegar de inmediato al comité copia de dicho acuerdo y del que también han alcanzado para el envasado de salsas y mayonesas, contratos que, por el momento, no han sido remitidos, cuando es obligación de la empresa informar a los representantes del personal sobre el objeto y duración de la contrata, el lugar de ejecución y en su caso, el número de trabajadores que serán ocupados por la contrata o subcontrata en el centro de trabajo de la empresa, entre otras cuestiones. Simplemente, la empresa ha asegurado verbalmente a la representación sindical que no habrá recolocaciones del personal de Ybarra en Carbonell, a excepción de los supervisores de calidad.

Esta falta de información, que vulnera el derecho de información al comité de empresa, así como algunas irregularidades en el proceder por parte de trabajadores dependientes de Ybarra en las instalaciones y la aparición de informaciones en prensa sobre acuerdos de los que nada sabe el comité están crispando los ánimos de los empleados y empleadas de Carbonell, que exigen que se aclaren todas estas cuestiones.

El comité había dado de plazo hasta ayer a la empresa para que aclarara los rumores acerca del futuro de la planta de Alcolea, sobre los que se limita a pedir a los trabajadores y trabajadoras que no crean todo lo que sale en prensa. Sin embargo, la plantilla está muy preocupada porque “cuando el río suena, agua lleva” y temen que en cualquier momento la propietaria decida deshacerse de la fábrica y acabar la relación de Córdoba con una marca que ha llevado el nombre de la provincia por toda España y medio mundo.

En este sentido, CCOO recuerda que la fábrica está en manos de CVC, un “fondo buitre” que está realizando movimientos que hacen sospechar el peor final para este buque insignia de la industria cordobesa. Así, a pesar de que Deóleo presentó en el primer semestre del año pérdidas, se incrementaron las retribuciones de los consejeros un 30% y de los altos ejecutivos un 28%, incrementos incomprensibles salvo que se esté preparando para deshacerse de la fábrica.

Ante esta situación, el comité de empresa ha decidido estudiar las posibles acciones que llevará a cabo tanto para conocer la información que legalmente tiene derecho a conocer como para defender la continuidad de una fábrica y una marca que es parte del patrimonio de los cordobeses.