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El juez trae a Córdoba las pruebas del caso Bretón para “su custodia”

Manuel J. Albert

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A pesar de la petición familiar, los restos de Ruth y José no serán enterrados hasta que se celebre el juicio

Ruth Ortiz, la madre de Ruth y José, los niños presuntamente asesinado por su padre, José Bretón, hace un año, no podrá enterrar los restos de los dos hermanos. El juez José Luis Rodríguez Lainz ha dictado una providencia por la que ordena que los huesos calcinados de los pequeños -de seis y dos años- sean remitidos a Córdoba para “su debida custodia” hasta la celebración del juicio. El magistrado también pide a la Policía que garantice la perfecta conservación de unos restos muy deteriorados por el efecto del fuego y los posteriores estudios, como el de ADN, que ha sido imposible de realizar. Así lo avanza hoy el diario ABC.

Las muestras se encuentran actualmente repartidas entre laboratorios de Madrid y Santiago de Compostela para su estudio. Su correcta vigilancia y mantenimiento es clave en un complicado caso de doble asesinato. Pero la defensa de Bretón, representada por su abogado, José María Sánchez de Puerta, ha puesto en duda que se haya seguido estrictamente el protocolo de la cadena de custodia, basándose en la declaración de una forense policial que echó en falta la presencia de una muestra (un trozo de cúbito catalogado con el número ocho). El juez ha pedido a la policía que revise la cadena de custodia. Esa misma experta que destacó la falta de una prueba es la misma que cometió un error garrafal cuando pocos días de desaparecer los niños y hallarse los huesos en una gran hoguera prendida por Bretón en su finca de Las Quemadillas, analizó los restos y dictaminó que eran de pequeños roedores.

Diez meses después, dos expertos, el forense Francisco Etxeberria y el antropólogo Bermúdez de Castro afirmaron sin género de duda que los pequeños huesos encontrados entre las brasas y calcinados por un fuego que había superado los 800 grados, eran de dos niños de las mismas edades que Ruth y José. Si bien sus dos informes difieren en el número de dientes encontrados (lo que podría poner en duda la suerte de alguno de ellos y, por tanto, la cadena de custodia), expertos consultados restan importancia a este hecho debido al enorme deterioro de las muestras y a que no cuestionan lo más importante: que los huesos coinciden con todas las características de Ruth y José.

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