Huevos, cereales, yogur, pescado, carne y miel: la 'cesta de la compra' para los animales del Zoo
El Ayuntamiento de Córdoba acaba de adjudicar distintos lotes del contrato de suministro de alimentos para los animales que viven en el Zoo de la capital por un importe total de 146.350 euros, según figura en el expediente de contratación de este servicio al que ha tenido acceso este periódico.
La particular cesta de la compra para los inquilinos del Zoo se compone de alimentos como huevos, cereales, arroz, hortalizas, frutas, frutos de cáscara, pescado, carnes (también presas vivas), queso, yogur, pan, miel y distintos tipos de pienso seco, entre otros.
La lista especificada en el pliego de condiciones de este contrato desglosa todos los tipos de alimentos y las cantidades necesarias para alimentar a los animales del Zoo, cantidades que van desde los 18.000 kilos de carne a los 22.500 de zanahorias, los 1.200 kilos de pescado, los 6.000 kilos de acelgas o todo tipo de frutas, y los miles de kilos de pienso específico para cada especie de las que pueblan el parque cordobés.
El suministro de los alimentos que componen la dieta de los animales del Zoo se ha contratado en distintos lotes a otras tantas empresas, algunas de las cuales establecen que los productos ofertados provienen de una distancia a la capital menor de 200 kilómetros.
El pliego de cláusulas de este contrato salió a licitación en noviembre de 2018, si bien hubo de ser rectificado en enero de 2019 y ha sido ahora, el pasado 16 de agosto, cuando se publicado la adjudicación de los distintos lotes de este servicio.
El objeto del contrato tiene como fin garantizar el suministro de alimentos a los
animales del Parque Zoológico Municipal de Córdoba. Los productos alimenticios procederán de empresas autorizadas y dadas de alta en el registro de comercio y actividades comerciales correspondiente. El embalaje, transporte y entrega deberán satisfacer todas las normas de higiene y disposiciones vigentes que correspondan. Los plazos de entrega y periodicidad de estas serán determinadas por las necesidades alimenticias de la colección animal y fijados por el personal del Zoo, según consta en el pliego.
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