El Gobierno niega que en la cárcel haya inseguridad por falta de guardias civiles

El Gobierno de España niega que haya problemas de seguridad en la cárcel de Córdoba. Así lo ha explicado tras las quejas formuladas por la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) que criticaba los riesgos por falta de personal, sobre todo en periodo vacacional.

La organización de guardias civiles criticó que en verano, por ejemplo, se produce “una gravísima situación” en la Sección de Seguridad Penitenciaria del cuerpo armado en Córdoba, porque “el capitán de la Compañía de Plana Mayor impartió órdenes para que se realizasen las conducciones de presos y detenidos incluso cuando no se dispusiese de personal suficiente para ello”.

El Ministerio del Interior niega la mayor y recuerda que para solventar problemas se activaron refuerzos de seguridad privada: “Tras el Consejo de Ministros que autorizó la contratación del servicio de apoyo a la seguridad en los centros penitenciarios, se emplearon vigilantes de seguridad en tareas de vigilancia desde puestos fijos, operadores de circuitos cerrados de televisión y control de accesos, cometidos estos, que ejercían [antes] efectivos de la Guardia Civil”, desgrana en una respuesta parlamentaria al diputado socialista por Córdoba, Antonio Hurtado.

El Gobierno recuerda que esta orden fue emitida “a raíz de las frecuentes conducciones y traslados de presos y detenidos, que la Unidad de Seguridad del Centro Penitenciario venía delegando a las diferentes unidades territoriales de la Comandancia de Córdoba, principalmente en el turno de tarde” a causa de su sobrecarga de trabajo.

La idea de estos refuerzos de seguridad privada era permitir a los agentes públicos dedicarse en exclusiva a los quehaceres para los que están formados. “La finalidad, entre otras, es destinar el mayor número posible de efectivos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado a la realización de funciones exclusivas de ellos, como la custodia de presos y penados fuera de los recintos, en hospitales o sedes judiciales, o el traslado de internos”, insiste Interior.

Por otro lado, el Ejecutivo informa de que considera “suficientes” los medios con los que cuenta la Unidad de Seguridad del Centro Penitenciario para el traslado de presos y detenidos: tres vehículos celulares y tres vehículos con mamparas especiales para su uso con menores. Y añade: “El servicio de esa unidad se ha visto reforzado con personal de seguridad privada, sin existir merma en la calidad ni operatividad en la prestación del servicio”. Es más, prosigue Interior: “En ninguna ocasión, durante los pasados meses de julio y agosto, se contó con un potencial por debajo del mínimo establecido en el Plan de Seguridad”.

Por último, el Gobierno informa que del total de 186 servicios efectuados por la Unidad de Seguridad del Centro Penitenciario en el período de julio y agosto, “tan solo en 20 ocasiones se aplicaron las órdenes para que se realizasen las conducciones de presos y detenidos, sin que ello haya supuesto una merma en la seguridad del Centro Penitenciario”. No obstante, el Gobierno reconoce que “se han impartido instrucciones al objeto de proponer una actualización del Plan de Seguridad”.