Una firma cordobesa diseña un plan para erradicar el picudo rojo
[jwplayer config=“myplayer” file=“https://cordopolis. es/uploads/2013/06/PicudoRojo. mov” image=“https://cordopolis. es/uploads/2013/06/PicudoRojo-v. jpg” width=“620” height=“349”]
VIDEO: HISTORIAS DE LUZ
Este escarabajo está acabando con buena parte de las palmeras de todo el Mediterráneo; esta empresa ya ha salvado la vida de la mayoría de los árboles de El Vaticano
Ya existe un método, único en el mundo, para el control del picudo rojo, una plaga que en los últimos diez años ha arrasado con buena parte de las palmeras del Mediterráneo que ya está afectando a otros puntos del país. En Andalucía ha obligado a cortar 20.000 palmeras desde 2009. Una empresa andaluza ha desarrollado una patente del departamento de Agronomía de la Universidad de Córdoba y ahora lleva a cabo tratamiento con inyecciones en el tronco de fitosanitarios cien por cien efectivas y que sustituye a la fumigación. Esta empresa salvó la vida de las palmeras de El Vaticano y actualmente en plena expansión comercial, colaboran con los Emiratos Árabes para la conservación de las palmeras datileras.
Según Ecologistas en Acción, la plaga está causando graves problemas fitosanitarios en todas las partes en donde se ha introducido. En nuestro país ha disparado ya todas las alarmas de los organismos encargados de la vigilancia de fronteras y la protección agronómica, tanto a nivel estatal como autonómico. Aparece reiteradamente en prensa y está empezando a crear alarma social entre los cultivadores de Canarias, Comunidad Valenciana y Murcia. Por una falta de previsión, han fallado las medidas preventivas y parece haberse aclimatado en el sureste de la Península y en las islas Canarias y ahora va a ser muy difícil erradicarla.
La empresa cordobesa lucha contra el picudo rojo a través de unas inyecciones en el tronco de la palmera en las que se introduce un producto fitosanitario que dura hasta tres meses y que contribuye a evitar que el picudo rojo anide en el interior de los árboles.
Este insecto pertenece al orden de los coleópteros (escarabajos) y a la familia de los curculiónidos (gorgojos). Su gran tamaño, entre dos y cinco centímetros, y color rojizo ferruginoso lo hacen inconfundible. La larva perfora galerías de más de un metro de longitud en los troncos. Sus plantas hospedantes son el cocotero (Cocos nucifera) y otras palmeras, en especial las del género Phoenix y la palmera de Guinea (Elaeis guineensis). Cuando se ven afectadas por la plaga, sufren amarilleamiento y marchitamiento, pudiendo llegar a producirse la muerte del pie afectado. El control de esta plaga es complicado y por el momento, a falta de método seguro, acaba con la eliminación de los pies afectados y los que se sospecha pudieran estarlo.
La plaga apareció por vez primera en España en 1994, en el litoral granadino, en Almuñécar. Tanto aquella vez como las posteriores introducciones en diversos puntos de Andalucía oriental, Murcia y Levante, ha llegado a través de palmeras infectadas procedentes de Egipto u otros países del norte de África.
Esta empresa ya está en más de 50 países y su próxima aplicación será en los países árabes para proteger las palmeras de dátiles.
0