Adelante ve “inaudito” que Ayuntamiento y Junta actúen “en contra” de la norma con la celosía de la Mezquita
La parlamentaria andaluza por Córdoba de Andalante Andalucía Luzmarina Dorado ve “inaudito” que el Ayuntamiento de Córdoba y el Gobierno andaluz de PP y Cs, “colaboren y se posicionen en contra de sus propias normas”, en relación con la llamada segunda puerta de la Mezquita-Catedral de Córdoba, cuya apertura supuso la retirada de una celosía que ahora el Tribunal Superior de Justicia de Andalucia (TSJA) ha ordenado reponer.
En este sentido y en un comunicado, Dorado ha opinado que la postura adoptada en este asunto por el Consistorio y por la Junta de Andalucía, la cual además había recurrido ante el TSJA la sentencia de un juzgado cordobés ahora confirmada por el Alto Tribunal andaluz, constituye “una incoherencia que no se sostiene y que no debe volver a repetirse”.
Así, ha recordado a la Junta que las “leyes de protección del patrimonio establecen que solo se pueden hacer obras en un bien protegido”, como es la Mezquita, que está declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, cuando dichas actuaciones “están destinadas a su conservación o protección”.
Ese marco legal, según ha afirmado Dorado, “no ampara el plan de reformas ejecutado por el Cabildo” en su momento, en base a un proyecto “que contaba con informes desfavorables de Icomos España, y que acabó sustituyendo la celosía por una nueva puerta para facilitar el acceso de las procesiones a la Mezquita durante la Semana Santa”.
Por eso, Dorado ha exigido la reposición inmediata de la celosía, al entender que, “al margen de los requerimientos de la Agrupación de Hermandades y Cofradías de Córdoba”, para que se mantenga la segunda puerta, “el deber de la Junta de Andalucía y del propio Ayuntamiento es conservar y cuidar del patrimonio de todos los andaluces, así como garantizar que las generaciones futuras tengan acceso a él tal y como fue incluido en la lista mundial del patrimonio”.
Por último, Dorado ha recordado que “la titularidad de la Mezquita sigue siendo, todavía hoy, una deuda pendiente con la ciudadanía cordobesa”, considerando que “un Bien de Interés Cultural (BIC), Patrimonio de la Humanidad y enclave histórico y simbólico de la ciudad, como es la Mezquita de Córdoba, pertenece a todos los cordobeses y nadie, ni el Cabildo, ni ningún representante de la Iglesia o de cualquier otra entidad, tiene derecho a privatizar un bien que es de todos”.
0