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Sergio Gracia Montes es graduado en Derecho por la Universidad de Córdoba. En 2018 impulsa desde Córdoba el Centro de Investigación de la Extrema Derecha (Cinved), con el que analiza y estudia los movimientos populistas y extremistas en España y a nivel internacional. Gracia cuenta con amplia formación en materia religiosa, política y de derechos humanos, e interviene en medios nacionales (Cuatro, La Sexta, Huffington Post, El Independiente, El Confidencial o El Temps) como experto en fanatismos y movimientos de ultraderecha.

Reclutados: el silencioso avance de la extrema derecha entre los jóvenes españoles

Imagen de redes de FACTA España.

Sergio Gracia

1 de junio de 2025 20:24 h

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El pasado viernes Falange Española convocaba una manifestación con la intención de llegar a las puertas de Lavapiés, uno de los barrios céntricos de Madrid con mayor cantidad de inmigrantes. Nada de lo que haga la extrema derecha es casual, ya ocurrió en 2021 con la manifestación convocada en Chueca y de la cual advertimos días antes del objetivo principal.

Hoy como hace cuatro años, se vuelve a poner el foco sobre la existencia de grupos neonazis operativos en el país. En 2021 la manifestación fue convocada por Madrid Seguro, que reivindicaba “la cultura e identidad de los pueblos de Europa a través de iniciativas que tienen como base” los barrios, estaban en contra de los centros de primera acogida y pisos tutelados por ser “un foco de inseguridad y desestabilización”. En la de Falange se gritaba “Joven español, defiende tu nación” donde para ellos, la defensa de la patria pasa por echar del país a todo aquel que no sea ni blanco ni cristiano ¿Alguna diferencia? Ninguna. Cuatro años después lo mismo, bajo lemas similares.

La captación de jóvenes

Lo que llamó la atención de los principales medios de comunicación de dicha manifestación, es que la media de edad estaba en torno a los 18 años, algo que debería preocuparnos como sociedad, pero sin que nos distraiga de dónde está el verdadero problema, como es la captación y los factores entran en juego.

En este punto deberíamos hacernos 2 preguntas ¿Dónde se captan a estos jóvenes? Y ¿Qué buscan estos en dichos grupos?

Sobre ¿Dónde se captan a estos jóvenes? Por un lado, hay que poner la vista en los movimientos ultras que campan a sus anchas por los campos de futbol; por otro, están los gimnasios en general, y los centros deportivos de deportes de contacto en particular; y por último, los Active Club, que aunque no hayan aterrizado con ese nombre aún en España, llevan existiendo desde hace años dentro de los movimientos juveniles afines a grupos de extrema derecha y neonazis. Por supuesto, no podemos obviar ni las redes sociales ni los vínculos familiares.

Sobre la segunda pregunta ¿Qué buscan en dichos grupos? es más compleja que la primera, porque entran en juego otros factores personales, ya que estamos ante adolescentes que están buscando dar forma a su identidad personal, que han podido tener problemas familiares, han podido padecer bullying escolar o han podido ser excluidos socialmente, y al entrar en ciertos ambientes, han sido recibidos con los brazos abiertos.

Los jóvenes y adolescentes que acaban aterrizando en estos grupos, pueden buscar un sentido de identidad y pertenencia que les falte en sus vidas, o donde pueden generar un fuerte sentido de comunidad y aceptación, especialmente para aquellos que buscan un lugar donde sentirse integrados y reconocidos.

En el sentimiento de pertenencia entra en juego el refuerzo de la identidad, la sensación de sentirse protegidos y seguros, especialmente en individuos que se sienten marginados o perseguidos o puede ayudar a crear lazos emocionales fuertes.

La interacción social en espacios como campos de fútbol, gimnasios y active club representa una parte fundamental de la vida de muchos jóvenes. Estos entornos no sólo son lugares de esparcimiento, sino también escenarios donde se comparten vivencias o experiencias, donde se programan nuevas acciones como manifestaciones, un entrenamiento al aire libre o una charla-debate con X persona para reafirmar o asentar principios ideológicos.

Los espacios mencionados son propensos a fomentar una fuerte camaradería entre estos individuos. Los jóvenes tienden a crear lazos basados en valores compartidos. Esta socialización se ve potenciada por el ambiente festivo y competitivo, que invita a la unión y al fortalecimiento de la identidad colectiva. Donde las experiencias compartidas en estos entornos juegan un papel fundamental en la consolidación de sus creencias y valores.  

Los Active Club en España

Los Active Club aparecen a finales de 2020, y desde entonces se estima que se han creado más de 100 clubes en Estados Unidos, Canadá y Europa. En España, aún no han cogido forma como tal, pero desde hace años, los movimientos juveniles de extrema derecha españoles, ofrecen vivencias similares.

En las manifestaciones que se llevaron a cabo en Ferraz en 2023 apareció alguna bandera de Active Club France.

¿Qué ofrecen los Active Club? Los Active Club conectan el fitness, la masculinidad y la ideología, ofreciendo un entorno ideal para el adoctrinamiento, donde se mezcla entrenamiento físico, camaradería masculina y narrativas identitarias.

El 23 de noviembre de 2024, tuvo lugar en Madrid una reunión de neofascistas en Madrid para analizar la masculinidad.

Desde los Active Club se promueve un discurso físico-identitario donde entra en juego un ideal concreto de masculinidad combativa, nacionalista y “anti-degeneración”, donde además se mete con calzador la decadencia actual de Europa, debido a la supuesta invasión y la pérdida de valores.

Desde los Active Club se incluyen con frecuencia referencias a potenciales conflictos violentos y la necesidad de “revivir la cultura guerrera de nuestra nación”. A los jóvenes se les ofrece un sitio “seguro” ante ese mundo hostil, ante esa posible crisis de identidad e incluso de masculinidad, donde se les venden lealtad y protección del grupo, vendiendo al joven occidental como víctima del feminismo, la inmigración y el globalismo.

El sentimiento de pertenencia del que hablábamos anteriormente, puede facilitar la adopción de ideologías extremas y el apoyo a acciones violentas, sin asumir las consecuencias. Por supuesto, el posicionamiento extremo, dificulta cuestionar la realidad y considerar otras perspectivas.

Todo esto nos obliga a ofrecer espacios seguros y herramientas donde los jóvenes puedan canalizar su necesidad de identidad, esfuerzo y comunidad sin caer en discursos de odio. Donde se aplique un monitoreo y prevención eficaz y efectiva por parte de todos los actores sociales para prevenir posibles radicalizaciones. Y donde se lleve a cabo una educación crítica por parte de los jóvenes sobre masculinidades sanas, donde se potencie el pensamiento crítico, y donde existan redes de apoyo.

Sobre este blog

Sergio Gracia Montes es graduado en Derecho por la Universidad de Córdoba. En 2018 impulsa desde Córdoba el Centro de Investigación de la Extrema Derecha (Cinved), con el que analiza y estudia los movimientos populistas y extremistas en España y a nivel internacional. Gracia cuenta con amplia formación en materia religiosa, política y de derechos humanos, e interviene en medios nacionales (Cuatro, La Sexta, Huffington Post, El Independiente, El Confidencial o El Temps) como experto en fanatismos y movimientos de ultraderecha.

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