Pequeños científicos en las aulas
La UCO dota a 20 escuelas de Infantil de material divulgativo práctico en el proyecto Rincones para la CienciaPara aprender a hacer ciencia, parte del camino, lo llevamos ya en los genes. Nuestro carácter, por naturaleza, es curioso. Cuando somos pequeños, ese rasgo del comportamiento humano está más agudizado. Para los niños todo es nuevo, todo es un misterio, todo está por descubrir. Sin querer, se hacen las mismas preguntas que los investigadores en los laboratorios o en los trabajos de campo. Y eso es lo que potencia el proyecto Rincones para la Ciencia, destinado a dotar de materiales didácticos a colegios de Infantil de Córdoba, para enseñar a los pequeños a hacer ciencia.Uno de los coordinadores del proyecto es Manuel Mora, profesor del departamento de Didáctica de las Ciencias Experimentales y Sociales de la Universidad de Córdoba. “Rincones para la ciencia es un proyecto de divulgación científica enfocado a la etapa de Educación Infantil a cuyos centros se dota de material y juguetes didácticos enfocados a explicar la ciencia”, señala el docente.Al proyecto, que está todavía en una fase piloto, ya se han apuntado 20 colegios en Córdoba capital y provincia. “Intentamos que los niños de esta primera etapa escolar trabajen el método científico que ellos ya de por sí son capaces de intuir sin saber lo que es exactamente: plantearse dudas, hipótesis, hacer experimentos sin saber que los están haciendo”, prosigue Mora.De esta forma, los niños de estas edades tan tempranas se convierten en el aula en pequeños científicos cuyas mentes creativas son capaces de trabajar la ciencia y de casi leerla sin saber saberlo. “Por ejemplo, hay experimentos relacionados con las ciencias básicas de la biología química y física. Acerca de un terrario con orugas los alumnos toman datos de los cambios de la oruga hasta que se convierte en mariposa”, detalla el profesor.“También tenemos experimentos de astronomía con salidas para observar la Luna y las estrellas e incluso una nebulosa con un telescopio que entregamos a los centros”, prosigue Mora. Por último, también se realizan sencillos experimentos químicos. “Con acciones que ven ellos en las cocinas o con las plantas de sus casas en las que pueden aprender cosas directamente”, concluye Mora.
La UCO dota a 20 escuelas de Infantil de material divulgativo práctico en el proyecto Rincones para la Ciencia
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