Macam vuelve a casa

Macam Bak no fichará por el Muser Auto Cordobasket. El club cordobés ha confirmado a través de un comunicado que debe “posponer” la incorporación del pívot estadounidense, de origen sudanés, que es sordo, porque no cuenta “con el apoyo necesario para acometer su fichaje”, que comporta “complicaciones económicas y administrativas”. El jugador, de 26 años y 2'08, ha puesto fin a las sesiones de preparación con la plantilla de Jesús Lázaro y regresará a su país tras pasar por Barcelona, donde está afincado.

El club “no arroja la toalla” y “sigue realizando contactos para conseguir el apoyo necesario para incorporar al jugador que ha dado muestras de un nivel deportivo acorde a la categoría EBA”, según indica. Para el jefe del banquillo, Jesús Lázaro, “Macam podría valernos deportivamente”, ya que están “muy contentos” con él, pues “ha demostrado implicación y ganas de aprender, algo fundamental en un jugador de baloncesto, a pesar de sus problemas de audición”.

El jugador ha mostrado tanto su potencial deportivo como su capacidad de adaptación y deseos de integrarse. El pasado fin de semana, en los prolegómenos del partido ante el CB San Fernando, el equipo colegial le tributó un homenaje en forma de aplauso. Estuvo en el banquillo, con la equipación del Cordobasket, pero solo como invitado. El club que preside Ángel Lopera indica que ha puesto “sensibilidad” y “todos los medios a su alcance para ayudar” a Macam, pero le faltan “los recursos económicos para atenderle convenientemente”, algo que el club, “dadas las previsiones actuales no puede asumir sin nuevas ayudas”.

Tras su aventura en Córdoba, Bak regresará a Estados Unidos con el fin de “regularizar su situación” y con el plan de regresar pronto a España para conseguir hacer realidad su sueño de ser jugador de baloncesto. Su lucha ha sido en las últimas semanas un ejemplo para las personas sordas y la integración a través del deporte. El Muser Auto Cordobasket asegura, en su comunicado, que apoyará el anhelo de Macam y “por qué no en Córdoba”. La puerta quedó entreabierta.