Julia Figueroa, a las puertas del bronce en Azerbaiyán

La cordobesa acaba quinta en la competición de judo, en categoría de menos de 48 kilos, en los Juegos Europeos tras caer en el combate por la tercer plaza ante la rusa Irina Dolgova

Una vez más, el deporte cordobés se quedó a las puertas de una nueva medalla en la primera edición de los Juegos Europeos, que se encaminan a su final estos días. Tras los dos cuartos puestos con que concluyó Lourdes Mohedano en el concurso general y en la final de cinco cintas de gimnasia rítmica, en esta ocasión fue a Julia Figueroa a la que se le escapó la opción de subir al podio. La judoca optó este jueves a la presea de bronce después de quedar fuera de la lucha por la final en su combate de cuartos. En la pelea por la tercera plaza en la competición de judo, en categoría de menos de 48 kilos, cayó ante la rusa Irina Dolgova, que compartió lugar en el cuadro de honor con la húngara Eva Csernoviczki -venció a la ucrania Maryna Cherniak en el otro duelo por el metal-. Así las cosas, la cordobesa se tuvo que conformar con una quinta posición que también resulta meritoria y el único trofeo para los representantes de la provincia en Bakú fue el oro alcanzado por Fátima Gálvez en Tiro, en la modalidad de Foso Olímpico.

Comenzó la competición para Julia Figueroa por la mañana en octavos, toda vez que estuvo exenta de la primera ronda. En su estreno, la judoca venció por la vía rápida a la rumana Cristina Budescu, ya que marcó un ippon cuando el reloj marcaba 1:07. De esta forma, la cordobesa daba un positivo primer paso en la carrera hacia la medalla. Sin embargo, en el siguiente combate quedó fuera de la lucha por alcanzar la final al caer ante la turca Ebru Sahin, que se impuso sin lograr ninguna técnica. Decidió la diferencia entre shidos (penalizaciones), que fueron dos para la cordobesa y tan sólo una para su rival.

Con todo, a Figueroa le restaba aún la posibilidad de pelear por la presea de bronce, para lo que debía antes superar la ronda de repesca. Lo hizo al vencer a la italiana Valentina Moscatt con un yuko marcado a los 2:51 de combate. Esa técnica resultó suficiente para lograr el triunfo ante su adversaria, que además tenía un shido en su contra. A la cordobesa le tocaba entonces enfrentarse a la rusa Irina Dolgova, que llegó a la lucha por el bronce tras caer en semifinales ante la belga Charline Van Snick, que a la postre se hizo con el oro. Pero a Julia Figueroa se le escapó el metal, después de que a su rival le bastara con un waza-ari logrado en el 2:36 de combate. Por tanto, la cordobesa acabó en quinto lugar tras una intensa jornada en Bakú.