El difícil reto de mantenerse

Llega un nuevo año y con él se abre un sendero de nuevos desafíos. El objetivo sigue siendo el mismo, aunque con las pilas cargadas y las fuerzas al máximo nivel. El sendero recorrido hasta el momento ha sido realmente satisfactorio, aunque lo que resta no es para nada baladí. De hecho, queda lo más duro. El trecho más importante, pues solo alcanzando el propósito final tendrá sentido todo lo trabajado hasta la fecha. Solo si se cumple con la meta fijada habrá merecido la pena todo el esfuerzo anterior. En el caso contrario, nada de ello tendrá sentido, y de nuevo el desenlace deberá calificarse como fracaso. No parece ser que vaya a producirse eso, aunque, en esto del fútbol, nunca se sabe. “Nada está hecho hasta que se consiguen los objetivos”, tal y como avisó el propio capitán Javi Flores hace algunos días. En efecto, queda mucho trabajo por delante.

Sea como sea, el Córdoba, que hay que recordar está en la cuarta categoría nacional, está completando -al fin- una campaña al nivel esperado. Quizá, incluso, por encima de lo que muchos auguraban. De hecho, visto lo visto en los últimos años, lo cierto es que las expectativas no eran muy altas. Básicamente por deméritos del club, tanto a nivel institucional como deportivo. No obstante, todo ha cambiado en este inicio de la 2021-22, donde el plantel dirigido por Germán Crespo está pulverizando todos los récords de su historia. Ya igualó la mejor marca de encuentros consecutivos sin perder y el propio técnico granadino tiene en su haber el mejor balance en el banquillo de la entidad. Asimismo, algunos jugadores también han ido sumando marcas históricas de victorias y partidos sin conocer la derrota.

Todo ello ha propulsado al Córdoba hasta la primera posición del Grupo IV de la Segunda RFEF con 37 puntos, siete más que su máximo perseguidor, que es el CP Cacereño. Además, tan solo los dos últimos empates cosechados fuera de casa han impedido al plantel marcharse al descanso navideño con una renta aún mayor. Y pese a todo, el balance es realmente sobresaliente. De momento, nadie ha logrado sacar nada positivo en El Arcángel en la competición doméstica. Ahora restan 54 puntos por jugarse, aunque lo cierto es que la plantilla espera alcanzar el propósito del ascenso matemático mucho antes.

Todos los datos anteriores establecen, como estadística puramente anecdótica, que el Córdoba es, por coeficiente, el segundo mejor club de todo el fútbol español. Así lo expone en sus redes sociales el perfil @2aBpro, quien expone que los blanquiverdes acumulan un coeficiente de 2,31, según los partidos jugados, la diferencia entre goles anotados y encajados y los puntos obtenidos. Ahí, únicamente el Real Madrid con 2,42 es mejor que los cordobesistas, entre los 172 equipos de las cuatro principales categorías. Por tanto, el verdadero reto no ha sido llegar a la cumbre, sino que estará a partir de ahora fijado en mantenerse en ella. Para lograr, al fin, ese propósito que todos anhelan.