El secretario pide que se actúe contra los ambulantes en semáforos

El equipo de gobierno del PP contesta que “nosotros no estamos en eso” e insiste en que es un informe que “no hemos pedido”

El secretario del Ayuntamiento de Córdoba, Valeriano Lavela, ha enviado un informe motu proprio dirigido a la concejal de Seguridad y Disciplina Urbanística, Carmen Sousa, para que la Comisión Consultiva de Tráfico de la institución municipal trate y estudie la “problemática ciudadana relativa a la venta ambulante de pañuelos de papel en la calzada” por personas que según el escrito son “parece ser originarios de otros países”. En el informe, al que ha accedido este periódico, el secretario asegura haber recibido “puntuales quejas verbales de diversos ciudadanos que circulan habitualmente con sus vehículos por las calles de esta ciudad” y que por eso, como secretario, se permite dirigirse a la concejal para que dé “las instrucciones oportunas” para resolver esta cuestión. El documento, fechado el pasado 10 de enero, asegura que estos ambulantes “se dedican permanentemente a la mendicidad, invadiendo la calzada, precisamente durante todos los intervalos de tiempo en que permanecen en rojo un elevado número de semáforos de esta ciudad”.

El portavoz del equipo de gobierno del PP, Miguel Ángel Torrico, ha sido tajante en su respuesta al decir que “nosotros no estamos en eso” y en insistir en que este es un informe que “no hemos pedido”, por lo que el Ayuntamiento no va a hacer nada con lo que considera que es un documento interno.

El secretario ya levantó una enorme polvareda la pasada semana con el informe que firmó (y que no sirvió para nada) para advertir a los concejales de que discutir la moción que IU presentó para condenar las palabras del obispo de la ciudad, Demetrio Fernández, podría ir contra la Constitución. Ahora, el secretario pide a la concejal de Seguridad que se actúe contra los ambulantes de los semáforos porque considera que esta actividad puede provocar “serios riesgos a la seguridad vial tanto de peatones como de conductores”. Lavela advierte cómo es el peligro: “Dichas personas se acercan sorpresivamente a los conductores que se encuentran parados, con el semáforo en rojo, distrayéndoles con el ofrecimiento de pañuelos u otros artículos y sucediendo, en múltiples ocasiones, que dichas personas se atraviesan entre los vehículos, estando los semáforos abiertos, provocando bruscos frenazos”, etcétera.

Lavela considera que la Policía Local tiene “base legal” para recibir instrucciones por parte de sus superiores para intervenir contra estos ambulantes, a los que insta a identificar y requerirles las documentación (“autorizaciones de actividades en vía pública, licencias de actividad, visados, permisos de residencia, de trabajo, etcétera”). El secretario cita dos subapartados de la ordenanza municipal de seguridad y vial y dos artículos, también, de la Ley sobre Tráfico, para cargar de argumentos legales las posibles acciones contra estos vendedores ambulantes.