La Piedad cree posible “una vía de acuerdo” para el Miércoles Santo

El Miércoles Santo está definido de cara a 2017. Al menos, tiene forma sobre el papel después de que el pasado viernes la Agrupación de Cofradías decidiera intervenir para fijar el orden por Carrera Oficial de dicha jornada debido a la falta de consenso entre las corporaciones que la conforman. Sin embargo, el proceso todavía continúa, dado que la Piedad mostró acto seguido su desacuerdo con el diseño establecido y optó por acudir a la Delegación Diocesana de Hermandades para su mediación. La cofradía de las Palmeras mantiene la esperanza de alcanzar un acuerdo, a través del diálogo, que ofrezca una solución a la problemática. La situación actual tiene como origen el hecho de que a ésta le corresponda abrir el recorrido común el año próximo con un itinerario que conlleva un incremento de tiempo en la calle.

Confía la hermandad de la Piedad en que es posible hallar un punto de encuentro que beneficie a todas las partes aunque ya exista una definición en firme del próximo Miércoles Santo. Así lo expone en un comunicado que lanzara en la medianoche de este martes a través de sus redes sociales. En el inicio del citado texto, la corporación claretiana “desea mostrar su preocupación por la situación que, desgraciadamente, debe afrontar con ocasión de su posición en Carrera Oficial” en 2017. “Nuestro cortejo procesional sobrepasa escasamente los doscientos hermanos, cada vez más jóvenes y a los que habría que añadir de manera permanente el peso de dos horas y tres cuartos más de recorrido, suponiendo a nuestro cuerpo de nazarenos una carga física que difícilmente se podría soportar”, añade la junta de gobierno de la cofradía.

Ésa es la razón por la que la Piedad mostró su desacuerdo con la decisión de la Agrupación de Cofradías y acudió a la Delegación Diocesana de Hermandades. La corporación claretiana dejó clara en todo momento su pretensión de ocupar el cuarto lugar, o dado el caso el quinto, en el orden de paso por Carrera Oficial el próximo año, tal y como confirmó días atrás a EL CIRINEO su hermano mayor, Raúl Torres. Sobre la mesa tenía dos posibilidades: abrir o cerrar la Carrera oficial en 2017. “Es prioritario para nuestra hermandad encontrar una solución que satisfaga” a todas las partes implicadas “y que al mismo tiempo impida” que su cortejo “se vea perjudicado y considerablemente mermado a consecuencia del incremento del tiempo de estancia en la calle y a previsión de regresar a nuestro templo a una hora inasumible”.

Desde la cofradía de las Palmeras, que señala como uno de sus principales objetivos “contribuir al engrandecimiento” de la Semana Santa cordobesa, aseguran en su nota estar “plenamente convencidos de que, con la ayuda de todos” se pueda “alcanzar una vía de acuerdo in extremis a este problema”. “Es momento para conciliación entre quienes creemos que todavía se puede arreglar o enmendar esta situación, con el sacrificio y la tolerancia de todos. Por nuestra parte ofrecemos nuestras humildes disculpas si en algo hemos podido incomodar al resto de hermandades. Dejemos a un lado las diferencias y las posiciones que en toda negociación son perfectamente legítimas, pero que ya forman parte del pasado”, expone la junta de gobierno de la Piedad, que apela a “mirar adelante” para lograr un consenso “con el objetivo de construir sobre los cimientos de la generosidad común el mejor Miércoles Santo”.