La Fundación Miaoquehago acomete cambios para su imagen de transparencia

El Patronato de la Fundación Miaoquehago, de ayuda a niños con problemas de desarrollo, en su última reunión del año 2017, ha decidido acometer diversos cambios de envergadura para reforzar la imagen de transparencia de la entidad.

Según ha indicado la entidad en una nota, el primero de ellos pasa por someter sus cuentas, en adelante, a una auditoría voluntaria, corriendo a cargo de la empresa Audiel el primero de los exámenes a realizar. Audiel tiene dilatada experiencia supervisando las cuentas de entidades sociales y pondrá al frente de este encargo a Javier Bernabéu, socio de la firma.

Con la intención de mejorar la gestión diaria y control de fondos de una institución cada vez más fuerte, el patronato ha decidido contar con los servicios profesionales que ofrece la entidad de Asociaciones y Fundaciones Andaluzas, dirigida por Juan Luis Muñoz Escassi, de la que Miaoquehago es miembro desde su constitución.

Por último, se ha nombrado como secretario no miembro del patronato al abogado Jesús Coca, compañero del anterior, Javier Valdecantos, pertenecientes ambos a la firma sevillana Montero Aramburu. Coca es experto en Derecho Público, ya ha ocupado cargos similares en entidades de la región y es un estrecho colaborador de otras instituciones sin ánimo de lucro.

El asesoramiento corporativo correrá a cargo del bufete Mora & Jordano Abogados, con una trayectoria consolidada de 15 años, que dirige el letrado cordobés Pedro Mora, y que actualmente presta el mismo servicio a entidades en Málaga, Córdoba y Madrid.

Además, el patronato se ha propuesto poner en marcha este año el Comité Científico, que pretende ir engrosando con el tiempo, invitando a formar parte de él a profesionales que abarquen en conjunto todo el abanico de problemas de desarrollo habituales en los beneficiarios de la fundación, desde cuestiones de salud hasta educativas.

Se consolida la línea de ayudas principal de la fundación, para pago de terapias habituales, y se potenciarán la ya iniciada con Bankia para familias sin recursos, la de supresión de barreras arquitectónicas en centros educativos y la de gastos extraordinarios.

Se cierra un año con una cifra acumulada de ayudas en torno a los 200.000 euros en todas sus líneas de trabajo, y se marcan como objetivo un crecimiento de 20 por ciento en 2018 gracias, en parte, a las medidas de transparencia que se ponen ahora en marcha, que supongan un mayor atractivo para empresas y particulares que quieran ayudar a la entidad de forma recurrente.