Cambio de tercio meteorológico: regresan el frío y lluvia

Se hace difícil leer estos días algo que no sea acerca del virus. También escribirlo. Hablar del tiempo que hace y del que vendrá. Pero ahí fuera, la vida sigue su curso. Tal vez sea bueno recordarlo para pensar que saldremos de esta. Los vencejos recién acaban de llegar a los cielos cordobeses para quién quiera escucharlos. El azahar ha explotado, llenando de aroma primaveral calles vacías de quién las huela. El cielo sigue su ritmo de alternancia de bajas y altas presiones, en un acto de cotidianidad, donde la llegada del verano se antoja ahora como un maná lejano que nos salve de la catástrofe.

Hasta entonces faltan unos meses, aunque ya en el cercano abril, los sabores veraniegos empezarán a adelantar los calores que estén por venir. Pero el invierno aún quiere asestar un último golpe, o penúltimo. Desde las últimas horas del domingo una vaguada al norte de la Península Ibérica comenzaba a descolgarse sobre nuestra vertical. Una masa de aire fría ganaba terreno sobre la Península, empujando el aire cálido hacia las capas altas de la atmósfera, favoreciendo la formación de potentes núcleos convectivos en su frente.

La tarde veía así llover con intensidad en puntos del norte de la provincia como consecuencia de las tormentas que se formaban, y que terminarían afectando al resto de la provincia ya en las primeras horas del inicio de semana. Para la mañana del lunes, la masa de aire ya se habrá aislado sobre nuestra vertical dando forma a una DANA, la cual nos afectará en las primeras jornadas de la semana, y que terminará sirviendo de 'punto de arrastre' a otra nueva baja que nos afecte ya de cara al fin de semana.

Descenso de 8 grados en 24 horas

Pero antes que eso desde el lunes viviremos una jornada más parecida a aquel casi inexistente invierno que a la de la primavera que ya transitamos. El cambio en el tiempo va a ser radical, especialmente por la brusca caída de las temperaturas. Las máximas a duras penas alcanzarán los 15 °C en el valle del Guadalquivir. Descenso de más de 8 grados previstos tras los más de 23 grados registrados en la tarde del domingo. Un salto que también se dará en el resto de la provincia, donde las máximas quedarán rondando los 10 grados.

Al ambiente frío le acompañarán también lluvias de carácter convectivo según se forme la DANA. Con el centro de la misma sobre la vertical cordobesa, la probabilidad de que nos afecten precipitaciones se convierte en toda una lotería. Esta situación continuará durante la jornada del martes, cuando en el desplazamiento que haga la DANA hasta el entorno del Golfo de Cádiz, nos sitúe en una posición más ventajosa para recibir precipitaciones.

Desde la tarde del martes la inestabilidad irá remitiendo hasta desaparecer por completo, con una recuperación igualmente brusca de las temperaturas, volviendo a situarse por encima de los 20 grados. Una vuelta a la estabilidad transitoria. De cara al fin de semana, una nueva baja llegaría hasta la Península, atraída por el efecto de los restos de la DANA aún en el norte africano. Nueva baja de carácter frío, que volvería a dejar lluvias en la Península, esta vez más generosas y generalizadas. Buena noticia, al fin y al cabo el campo sigue sediento. Siempre hay esperanza.

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