Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
Lee ya las noticias de este sábado

La alcaldesa y los concejales de Baena llevan sin cobrar desde junio por la falta de acuerdo sobre sus salarios

Panorámica del Pleno de Baena.

Alfonso Alba

0

Cinco meses de trabajo y cinco meses en los que no van a percibir remuneración alguna. La situación que atraviesan la alcaldesa, Cristina Piernagorda (PP), y los concejales del Ayuntamiento de Baena es del todo menos normal. La falta de acuerdo sobre el importe de los salarios a percibir, la cantidad y la manera entre los diferentes grupos municipales está provocando auténticos dramas personales entre la Corporación: muchos concejales han pedido regresar a sus trabajos porque, directamente, no llegan a final de mes.

La situación en Baena es fruto, principalmente, de un acuerdo de gobierno precario que nada más comenzar ha mostrado sus primeras diferencias. Por primera vez desde 1979, Baena tiene un alcalde que no es del PSOE. Un pacto a tres bandas entre el PP, Ciudadanos y el partido independiente del histórico exsocialista Luis Moreno descabalgó al PSOE del Ayuntamiento. El acuerdo se produjo en el último minuto y convirtió a Piernagorda en alcaldesa. Pero ha sido prácticamente el único acuerdo con mayoría absoluta en la Corporación.

Normalmente, uno de los primeros acuerdos de una Corporación es el reparto salarial. A estas alturas, prácticamente todos los ayuntamientos de España tienen decidido quién cobra qué y de qué manera. De hecho, no es extraño que por muy mal que se lleven el acuerdo se adopte por unanimidad, y tanto el gobierno como la oposición se pongan de acuerdo en los salarios y el número de concejales liberados que le corresponde a cada grupo, además del personal laboral y las ayudas que percibirán los partidos.

En Baena, el acuerdo ha sido imposible. Tanto, que ni Ciudadanos, que tiene un acuerdo de gobierno con el PP, ha votado la propuesta de la alcaldesa. Y el acuerdo futuro también parece improbable. Fuentes oficiales del Ayuntamiento de Baena confirmaron a este periódico que el acuerdo sobre los salarios tampoco irá al Pleno correspondiente al mes de octubre por lo que, al menos, los concejales, la alcaldesa y todo el personal que trabaja para los partidos estarán otro mes sin cobrar.

De momento, el PP solo tiene la abstención de IU sobre las retribuciones, algo totalmente insuficiente. Ciudadanos, su socio de gobierno, votó en contra. Lo mismo hizo el PSOE, que aunque no le pareció mal la propuesta consideró incoherente ceder la alcaldía de Albendín a otro partido que no fuera el socialista. Luis Moreno, y su formación independiente, también rechazó la propuesta.

El salario del anterior alcalde, Jesús Rojano, del PSOE, fue polémico. El regidor se subió el suelo justo al límite de lo que podía cobrar un alcalde de un ayuntamiento como el de Baena, 54.000 euros brutos al año. Es un salario de apenas 6.000 euros menos que el que cobrar el alcalde de Córdoba, por ejemplo. Ahora, Piernagorda planteaba un salario de 35.000 euros brutos al año, y que los tenientes de alcalde cobraran 28.000 euros.

El Pleno del pasado mes de septiembre fue el que rechazó la propuesta. La alcaldesa acusó al PSOE y Ciudadanos, junto al partido de Luis Moreno, de estar pactando una moción de censura para recuperar la Alcaldía. Mientras, los socialistas insistían en que lo que querían era la alcaldía de Albendín y el portavoz de Ciudadanos, Ramón Marín, sostuvo que en la propuesta del PP él no estaría liberado. Al principio del mandato, Marín renunció a estar liberado en favor de un compañero, pero con el paso de los meses, argumenta, comprobó que para desarrollar su trabajo debería estarlo.

Ahora, la situación el Baena es crítica. Muchos concejales y personal que ya trabaja para los grupos municipales directamente no llega a final de mes. En algunos casos, incluso, están empezando a aflorar problemas con las hipotecas mientras el Ayuntamiento de Baena es un polvorín. Varios concejales, mientras se resuelve este problema, han pedido volver a sus puestos de trabajo.

No obstante, lo que está claro es que un ayuntamiento del tamaño de Baena no puede funcionar sin ediles liberados y que actualmente el trabajo municipal se está resintiendo por esta extraña resistencia a aprobar los salarios de todas los concejales, y la endémica falta de acuerdos en este ayuntamiento.

Etiquetas
stats