Andalucía II (espacios)

Andalucía es una canción de Antonio Luque.

De los discos antiguos, bien El Fuego Amigo, bien El Mundo Según. Es un refranero cargado de palabras como picadillo, estuche, campo, santo, pueblo, hierba, barquero, paseo de poniente.

Las perchas de los hoteles no pueden ser robadas.

No veía la casa desde un autobús desde 1994.

Huelva

Hay un eclipse tras la salida de emergencia.

Dentro de unos años habrá un español que escriba un libro que ya escribió un boliviano. Maximiliano Barrientos ha retratado el regreso del emigrante en una novela, “La desaparición del paisaje” que ha editado dulcemente Periférica. Una novela que nos cuenta lo que querrá contar un escritor español dentro de diez años, quizá, cuando la gente que se ha ido empiece a volver, cansados de fish and chips, de metro y gorro de lana, de Ryanair y AVE. Cuando les echemos en cara que no conocen a nuestros hijos, que no vivieron la muerte de algunos mayores y otros no tanto, que no entiendan que estamos enfadados y que les echamos de menos, que la ciudad era peor sin ellos. Dentro de unos años, cuando un escritor español escriba ese libro creerá que ha abierto un camino obviando que ya estaba hecho y hablaremos de una novela generacional y ellos tendrán ya más de cuarenta y su futuro será prometedor, pero el pasado habrá dejado un reguero de aburrimiento insalvable, de insignificancia y archivos de Whatsapp almacenados y de conversaciones de Skype insípidas. Y cuando ese libro llegue a nuestras librerías entenderemos que no mereció la pena veros en Semana Santa, que fue peor el lunes de pascua con las calles vacías, sin pipas, y con la cera que nos recuerda la falsedad, hastaluego nosvemosenlaferia.