El hambre estimula el ingenio

Ayer se celebró la exposición pública de ideas del concurso A3BT! convocado por el Campus de Excelencia Internacional en Agroalimentación (ceiA3) de la UCO. De entre las más de 40 ideas que acudieron a la llamada del pasado enero, 11 de ellas fueron preseleccionadas para esta sesión frente al jurado.

Desde drones, ya saben, esos aviones o helicópteros no tripulados, que informan del grado de maduración de las uvas de un viñedo para recogerlas en tiempo y hora, hasta un sistema para detectar y certificar que la hamburguesa que estás a punto de zamparte no tiene una pizca de carne de caballo. Pasando por nuestro questfor.me, un sistema que permite a investigadores, administraciones o empresas generar sus propios cuestionarios para conocer mejor a su usuario, y además, orientarlo e informarlo, todo en unos cuantos clics.

El hambre estimula el ingenio. La crisis nos ha matriculado a la fuerza en el curso “Cuida de este euro como si fuera el último”, donde nos impartirán lecciones tan imprescindibles como “Sal a la calle y busca nuevas oportunidades”. Este aprendizaje lo traían de serie nuestros padres, pasaron por esa franja estrecha de la vida al principio de su itinerario vital. A nosotros, sin embargo, nos ha pillado con el pie cambiado. En un juego de la oca ascendente, de continua mejora de la sociedad del bienestar en general y de nuestra situación personal en particular, hemos caído en la casilla de la calavera, y estamos ahora intentando salir de la casilla de salida.

En estas convocatorias, como la del ceia3, Ideas Loyola o el StartUp weekend, afloran las iniciativas que dejan entrever el potencial investigador y empresarial que hay en nuestro entorno. Creo además que el apoyo de la universidad a proyectos empresariales que trasladen el conocimiento desde la academia a la sociedad, con aplicaciones tangibles, es imprescindible para salir de esta situación. Lástima que la Administración central no lo vea así, o esté muy abajo en su lista de prioridades, porque la educación y la investigación son las bases de la empresa de calidad, imprescindible si queremos un sociedad mejor.