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La FAMP y administraciones públicas visibilizan el problema de la despoblación en Andalucía

Autoridades asistentes a la jornada de formación de la FAMP celebrada en Moriles sobre la despoblación en Andalucía.

Redacción Cordópolis

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El Gobierno de España, la Junta de Andalucía, diputaciones y ayuntamientos, a través de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP), han mostrado este martes en Moriles su “férreo compromiso” en la lucha contra la despoblación, que afecta a comarcas y municipios de la Andalucía interior.

En este sentido y según ha informado la FAMP en una nota, la secretaria general de la misma, Yolanda Saez Cuevas, ha presentado la jornada de formación denominada 'Haciendo redes contra la despoblación en Andalucía', en la que se ha puesto de relieve que “la despoblación es un problema social, medioambiental y patrimonial, cuyas verdaderas soluciones deben nacer del territorio, de los protagonistas que se mantienen en los pueblos, soluciones que necesitan del esfuerzo colectivo y recursos que no pueden aportarse sólo por los ayuntamientos, de ahí la necesidad de conformar redes y alianzas”.

Esta acción formativa, enmarcada en el Plan de Formación Continua 2023 que organiza la FAMP junto al Instituto Andaluz de Administración Pública (IAAP) de la Junta de Andalucía, ha sido inaugurada por el presidente de la Federación y alcalde de Córdoba, José María Bellido; el consejero de Justicia, Administración Local y Función Pública de la Junta de Andalucía, José Antonio Nieto; la directora general de Políticas contra la Despoblación del Gobierno de España, Juana López Pagán; el presidente de la Diputación de Córdoba, Salvador Fuentes, y la alcaldesa de Moriles, Francisca Carmona.

En la inauguración, las autoridades se han mostrado de acuerdo en que los retos actuales pasan por la mejora de las relaciones entre los ámbitos urbano y rural, donde las ciudades intermedias pueden ejercer como factor de equilibrio entre población y territorios a través de un nuevo contrato entre ambas áreas, para lograr territorios más iguales, activos y funcionales.

Al mismo tiempo, se han comprometido a apoyar y fomentar esa red, para trabajar desde todas las administraciones públicas, así como a la cooperación en la transferencia de buenas prácticas en materia de despoblamiento, puestas ya en marcha en Andalucía por entidades públicas y privadas.

En este contexto, el consejero de Justicia, Administración Local y Función Pública, José Antonio Nieto, ha expuesto la estrategia frente al desafío demográfico en Andalucía, defendiendo “la calidad de vida y de servicios” que ofrecen los municipios andaluces, por lo que ha instado “a revertir la imagen negativa que se suele trasladar del mundo rural y difundir esa oferta para captar nuevos habitantes interesados en ese estilo de vida”.

Ha subrayado que “Andalucía no sufre un problema generalizado de despoblación”, como otras comunidades autónomas, sino que “aún crece demográficamente, pero ese crecimiento no es equilibrado”. En este sentido, ha abundado en que más de la mitad de los habitantes se concentran en una treintena de capitales y grandes ciudades, y mientras que comarcas de interior se vacían, en cambio se saturan zonas de costa.

Nieto ha recordado que “el reto es lograr un reparto más equilibrado de la población”, para lo que la Consejería está diseñando una estrategia, en colaboración con el Centro de Estudios Andaluces (Centra) y un grupo de expertos, y para la que ha tendido la mano a la FAMP, a los ayuntamientos y diputaciones, para trabajar conjuntamente.

Por su parte, el presidente de la FAMP y alcalde de Córdoba, José María Bellido, ha reivindicado la importancia del trabajo conjunto entre todas las administraciones para adoptar las medidas estructurales para afrontar los retos demográficos en la próxima década.

A este respecto, ha subrayado que “sólo desde la suma de esfuerzos del municipalismo con el resto de las administraciones se puede garantizar el éxito de objetivos comunes, retos de todos que siempre van a redundar en un mejor equilibrio del territorio, que supondrá garantizar mejores servicios y más calidad de vida para nuestros vecinos”.

La directora general de Políticas contra la Despoblación del Gobierno de España, Juana López Pagán, por su lado, ha expresado su compromiso con el municipalismo desde su etapa en la FEMP, afirmando que “el reto demográfico es un reto democrático” para combatir las desigualdades territoriales y entre ciudades y pueblos, señalando que “la vertebración y la cohesión territorial son fundamentales”, y por ello ha animado “a la Junta, las diputaciones y ayuntamientos a trabajar conjuntamente, y especialmente a las corporaciones locales, porque estáis en el cuerpo a cuerpo diario con los vecinos y ofreciendo respuestas a sus problemas”.

López Pagán ha puesto de ejemplo el “trabajo y el compromiso de la FAMP” en la problemática de la despoblación, “siendo esta institución un referente nacional y europeo con una hoja de ruta en la que se apuesta por crear redes, una gobernanza multinivel y la colaboración público-privada. Por ello está siendo replicada por otras federaciones de municipios de España”, según ha asegurado.

Fuentes, preocupado por los pueblos que están “en peligro de extinción”

Por su parte, el presidente de la Diputación de Córdoba, Salvador Fuentes, ha manifestado su preocupación ante un informe de la FEMP en el que se indica que diez municipios de la provincia se encuentran “en peligro de extinción”, en las comarcas de Los Pedroches, Guadiato y la Subbética, advirtiendo que el problema se agudiza por el “envejecimiento” del censo de estas poblaciones, la escasa o “nula natalidad” y la “ausencia de un relevo generacional, lo que está provocando una pirámide regresiva”.

Fuentes ha apuntado algunas soluciones, como la mejora de la conectividad en infraestructuras y digital, porque “estos dos aspectos son fundamentales” para fijar la población en el territorio, lo que permitiría vivir en pueblos con calidad de vida y buenos servicios, y ha recordado que en la Diputación tiene “el reto demográfico como uno de los principales objetivos, porque nuestra provincia y Jaén tienen un serio problema de despoblación en algunas comarcas”, y ha apostado por fomentar el papel de las ciudades medias, que deben ofrecer servicios de calidad.

El presidente de la Diputación de Córdoba, Salvador Fuentes, ha participado este miércoles en Moriles en la jornada 'Haciendo redes contra la despoblación en Andalucía', una actividad organizada por la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP) en la que ha dado a conocer cuál es la situación de la provincia y qué soluciones tiene previsto implementar la institución para luchar contra el despoblamiento, apostando por “garantizar la conectividad física y digital de la provincia”.

En este sentido, Fuentes ha señalado que “hay pueblos que pierden población, no con la alarma que hay en otros territorios de España, pero tenemos que prestar atención a esos diez pueblos de menos de 1.000 habitantes que están por toda la provincia de Córdoba y en los que tenemos que poner la prioridad de actuar”.

Para ello, ha subrayado la necesidad de “hacer un plan, un diagnóstico, para a partir de ahí intentar actuar entre todos de manera transversal y no quedarnos en epígrafes; con una política seria, razonable y eficaz de luchar con la despoblación”.

En cuanto a los retos que debe afrontar la provincia, Salvador Fuentes ha señalado que “el desafío está en la conectividad física, no hay ningún pueblo que esté a más de una hora de la capital, pero también hay que lograr la conectividad exterior con Málaga, Castilla La Mancha y Extremadura. Una vez que garanticemos esa conectividad física, tenemos que abordar la conectividad digital”.

“Tenemos que conectar cualquier aldea de la provincia con el mundo, si no es imposible tener calidad de vida y trabajo; eso es muy importante porque tenemos el mejor territorio para vivir pero también tiene que serlo para trabajar. Además, a través de la red de ciudades medias que tenemos, hay que garantizar servicios básicos”, ha manifestado.

En definitiva, ha concluido que “tenemos que impulsar políticas transversales entre todas las administraciones y contar con una hoja de ruta donde todas sepamos lo que tenemos que hacer. Tenemos que hacer que la gente venga a vivir, a disfrutar y a trabajar, y para eso tenemos que dar oportunidades y trabajar todas las administraciones unidas”.

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