La remontada, una 'misión imposible' que ya no lo es

El Córdoba ganó en Lugo tras voltear el marcador, algo que no hacía desde abril de 2014, ante el Alcorcón | Ese curso 2013-14 también reaccionó ante el Numancia, rival del próximo domingo

Desde este domingo mira la tabla desde las alturas. Tan elevada es su posición que en realidad atiende por encima, pero no del hombro, al resto de sus rivales. Salvo al Osasuna, un líder con el que comparte puntuación. Sin embargo, Oltra es prudente y recuerda eso de que “el halago debilita”. El técnico advirtió del peligro que puede tener un excesivo optimismo después de que el Córdoba venciera en Lugo y encadenara su quinta jornada consecutiva sin conocer la derrota. Lo cierto es que la actual trayectoria del conjunto blanquiverde es poco menos que envidiable, del mismo modo que su estado de forma. Sin duda alguna, el equipo atraviesa una situación tan positiva como olvidada por estos lares. La buena dinámica, una cuestión en la que cree el preparador valenciano –ya lo dejó claro el domingo–, del cuadro califal conlleva que incluso haya podido romper varias rachas negativas de una sola tacada. Una de ellas corresponde al tiempo que tardó en volver a remontar un encuentro, algo que no hacía desde hace casi un año y medio exacto.

Fue una tarde de abril de 2014, la del Domingo de Ramos, cuando el Córdoba logró por vez última dar la vuelta a un resultado adverso. Corría la jornada 34 de la campaña 2013-14. El encuentro se disputaba en El Arcángel, adonde llegaba el Alcorcón, entonces bajo la dirección de Pepe Bordalás. En el banquillo blanquiverde se sentaba un Albert Ferrer que había salvado su puesto una semana antes en El Molinón, el lugar en el que empezó todo –el salto a Primera–. A los 37 minutos de juego, Iribas, que acabaría expulsado en el tramo final del duelo, marcó y golpeó a la escuadra local, que había de sobreponerse si deseaba alcanzar su segundo triunfo consecutivo. Bien que lo hizo, pues finalmente consiguió vencer por 3-1. Además, la reacción fue rápida, pues al descanso se marcharon los califales con el equilibrio de nuevo en el tanteador. Abel Gómez anotó desde el punto de penalti, como hiciera a cuatro del final para sentenciar. El capitán del ascenso abrió y cerró el camino a la victoria en un partido en el que también vio puerta Arturo.

Entre aquel día y el domingo existe un doble cambio de curso, un ascenso histórico y el más doloroso de los descensos. Desde entonces no cerraba una remontada el Córdoba, que en Lugo sumó un punto de aceleración más a una de esas dinámicas en las que cree Oltra. Las inercias son reales, tanto que los blanquiverdes dieron la vuelta al marcador del Anxo Carro tras anotar dos tantos en un mismo choque después de 29 oficiales. Y las estadísticas están para ser rotas, suelen decir. En tierras gallegas puso el cuadro califal punto final a un ciclo de 60 encuentros –entre Liga, play off (2013-14) y Copa– ganar un enfrentamiento que comenzó perdiendo. Curiosamente, la anterior ocasión en la que consiguió voltear un resultado tuvo lugar la temporada del ascenso y fue ante el Numancia, conjunto que visitará en sólo unos días El Arcángel. La victoria cordobesista entonces, el 14 septiembre de 2013, fue, también, por 3-1. Con o sin necesidad de reacción ante un golpe rival, no estaría mal repetir tanteador.