De escaparates por el Coliseum
Al tiempo que trata de cerrar la contratación de su nuevo entrenador, el Córdoba sigue con su labor de rastreo de mercado para reforzar al equipo. Si bien por el momento los anuncios oficiales se hacen de rogar, el director general deportivo blanquiverde, Luis Oliver, mantiene un intenso trabajo en este sentido de cara a la temporada 2018-19. Para la misma el cuadro califal pierde a su gran referente de la pasada campaña, un Sergi Guardiola que da el salto a Primera mediante cesión al Getafe. Una salida ésta que abre el abanico de futuribles para el club califal, que por el acuerdo con el club del sur de Madrid tiene opción de realizar hasta tres incorporaciones a coste cero, según explicara el viernes el presidente cordobesista, Jesús León. Tres préstamos conceden los azulones, alternativa para la que son varios los nombres barajados. El cordobés Álvaro Jiménez y Dani Pacheco son dos, pero también hay otros como el Molinero. En cuanto a Jorge Molina, confirmado el interés, su contratación pasa más bien por una vía diferente a la que engloba la mencionada operación.
En torno a 1,5 millones es lo que, entre unos pagos y otras cláusulas, puede ingresar el Córdoba por la cesión de Sergi Guardiola al Getafe. Una cantidad que va a fluctuar en dependencia de lo que obtenga del acuerdo con el cuadro madrileño. Así, el club está desde días atrás de escaparates por el Coliseum Alfonso Pérez. Y aunque mira al detalle, tiene claras sus ideas sobre lo que quiere. El propio Jesús León adelantaba el viernes que ya había cartas sobre la mesa, pero que restaba cerrar las jugadas. Entre las opciones, dos citó el mandatario blanquiverde. Una es la de Álvaro Jiménez, si bien sus circunstancias resultan especiales para el caso de que se trata. El cordobés, que fue pieza importante en el ascenso azulón a Primera hace dos campañas apenas gozó de la confianza de Bordalás en la 2018-19 y ahora termina contrato. Su vinculación con la entidad getafense concluye el 30 de junio y por el momento no ha tenido oferta para su continuidad.
La cesión del joven centrocampista depende por tanto de que primero su todavía club de pertenencia decidiera prorrogar su contrato. En ello está el Córdoba, que conoce el interés que por el cordobés tienen otros clubes. Llama la atención incluso en Primera, como ocurre con el Rayo. En cuanto a Dani Pacheco, se trata de otro jugador que no tuvo participación con José Bordalás y cuya salida parece clara de cara a la próxima temporada. Y ahí el conjunto blanquiverde pretende contar con preferencia. Para el ataque suenan además el nombre de Chuli, según apuntó El Día de Córdoba. El punta natural de Huelva ya estuvo bajo el foco de la entidad califal en mercados anteriores, pero nunca puso rumbo a El Arcángel. La última campaña hubo de salir cedido ya en enero debido a la falta de minutos en el Coliseum. Jugó en el Lugo, donde le entrenó Francisco, quien hoy por hoy continúa con ligera ventaja en el casting para ocupar el banquillo cordobesista.
También aparecen nombres en la parcela defensiva. En este caso, es del gusto de la dirección general deportiva del Córdoba Francisco Molinero. De hecho, en Madrid se señala la más que probable salida del futbolista de Ontígola (Toledo) con destino a orillas del Guadalquivir para acompañar a Álvaro Jiménez. Pero todo está incipiente en el plano oficial, ya que el club debe formalizar con el Getafe los préstamos que desea llevar a cabo como contraprestación de la cesión de Sergi Guardiola. Además, en lo que se refiere al toledano, su incorporación supondría forzosamente un adiós o hasta luego en la plantilla. No en vano, el lateral derecho, que es la posición en la que se desenvuelve, está cubierto con Fernández y Loureiro. Con el primero el club quiere llegar a un acuerdo para rebajar sus emolumentos, el segundo aparece por su parte como jugador al que otorgar minutos de crecimiento en otro equipo. Lo del gallego, si así fuera, sería por la modalidad del préstamo igualmente.
Un método éste que parece no va a ser el elegido para incorporar a Jorge Molina si el delantero decide recalar en El Arcángel. El motivo es claro, le resta un año de contrato únicamente y poco sentido tiene de esta forma activar la fórmula de la cesión. Hecho éste que no implica que dicha opción quede completamente descartada. Los factores que condicionan la llegada del alcoyano son su edad -36 años-, la elevada ficha con que cuenta en Getafe y el interés que por él tienen diversos conjuntos de Primera y de Segunda A. El Córdoba, sin embargo, está dispuesto a firmarle mientras apura sus posibilidades por Rubén Castro, cuyo destino se vislumbra en Las Palmas. “Él quiere venir”, aseguró Jesús León en cuanto al veterano atacante alicantino. La realidad es que su relación con Luis Oliver puede jugar a favor de los califales.
0