Así llega el CD Leganés: crisis total, técnico interino y huelga en la grada

Si hay un momento de incertidumbre para visitar el Estadio Ontime Butarque, es este. El CD Leganés afronta la jornada 17 de LaLiga Hypermotion inmerso en una tormenta perfecta de acontecimientos. Lo que a principio de curso era un proyecto diseñado para el ascenso directo, hoy es un equipo que marca la frontera con la zona roja (18º, 18 puntos) y que vive días de máxima agitación. Así llega el próximo rival del Córdoba Club de Fútbol: en pleno cambio de ciclo, eliminado de la Copa del Rey y con su once titular condicionado por las bajas.

La semana en el sur de Madrid ha sido frenética y se cobró anoche su decisión más drástica: Paco López ha dejado de ser entrenador del equipo. La derrota en Copa del Rey ante el Albacete (1-2) precipitó el final de una etapa marcada por la ansiedad y la falta de resultados. Ante la premura del calendario, el club ha optado por una solución de la casa: Igor Oca, técnico del filial que estaba cuajando una gran temporada en Tercera RFEF, asume el mando de forma interina. Su misión será gestionar un vestuario tocado anímicamente y preparar el partido con apenas dos sesiones de trabajo.

El Córdoba CF se encontrará un escenario complejo, donde la presión jugará un papel fundamental. Butarque, lejos de ser el fortín de antaño, se ha convertido en una asignatura pendiente para los suyos: el Leganés es el peor equipo local de la categoría, habiendo sumado solo 5 de los 21 puntos disputados en casa. A esa estadística se suma el descontento social. La grada de animación 'Once Leones' ha convocado una huelga para este domingo en protesta por la gestión del club. Dejarán vacío su sector durante los primeros 10 minutos y no animarán hasta el 15. Un silencio inicial que puede pesar como una losa sobre los jugadores locales si el partido no arranca de cara.

Un once obligado a la improvisación

Pero el reto mayúsculo para Igor Oca estará en la confección de la alineación. El Leganés recibe al Córdoba con ausencias capitales en su columna vertebral debido a las sanciones del Comité de Competición. No estará su referencia en el eje de la zaga, el excordobesista Marvel, autor desgraciado de un autogol en Copa y expulsado el último partido en una nueva decisión absurda del VAR; ni su ancla en el centro del campo, Amadou Diawara, vital para el equilibrio defensivo, tras ver la quinta cartulina amarilla del ciclo.

Sin embargo, la baja más sensible está en la delantera: Duk. El atacante caboverdiano, máximo goleador del equipo con 4 tantos y su pieza más desequilibrante por velocidad, no estará disponible tras ser expulsado en Zaragoza por una agresión absurda fruto de la frustración -una acción que su propio capitán, Juan Soriano, calificó públicamente como “fallo de niñato”-. Sin él, el Leganés pierde su mayor amenaza al espacio y su capacidad de intimidación.

Con este panorama, el rival fía sus opciones al talento individual de Juan Cruz, el único verso libre capaz de generar peligro de la nada, y a la seguridad de Juan Soriano en la portería, quien ha evitado males mayores durante la temporada. El equipo ha demostrado tener pegada -generó 22 tiros ante el Almería- pero sufre un bloqueo de cara a puerta y una fragilidad defensiva preocupante, encajando 6 goles en sus últimos dos partidos de Liga.

Y así, el Córdoba CF visita a un gigante en horas bajas, obligado a reinventarse sobre la marcha y con la necesidad imperiosa de ganar para no caer a puestos de descenso. Un contexto de urgencia y provisionalidad en el rival que los blanquiverdes intentarán aprovechar.