El esplendor recuperado del histórico Palacio Ducal de Fernán Núñez tras su restauración

El histórico Palacio Ducal de Fernán Núñez (Córdoba) ha recuperado su esplendor tras las obras de rehabilitación realizadas durante los tres últimos años y que, una vez finalizadas, ha recepcionado oficialmente el Ayuntamiento esta misma semana como titular del edificio, según ha anunciado el alcalde de la localidad, Alfonso Alcaide.

Los trabajos, que se han llevado a cabo con financiación del Programa para la Conservación del Patrimonio Arquitectónico e Histórico -el 1,5% Cultural-, han sido ejecutados por la empresa Antroju con el proyecto de restauración redactado y dirigido por el estudio Arquinexos. “Han sido más de tres años de trabajo y hoy podemos decir con orgullo que el Palacio Ducal vuelve a lucir en todo su esplendor”, ha aplaudido el regidor. Ahora, queda dotar del mobiliario necesario al inmueble para poder abrir las puertas a la ciudadanía.

El Palacio Ducal de Fernán Núñez es un edificio singular con una historia de siglos. Fue construido sobre una primera atalaya de época árabe, a la que se sumaron otras más en una fortificación con murallas, un castillo que hizo posteriormente de Casa del Señorío tras la época de la conquista cristiana y acabó convirtiéndose finalmente en el palacio que utilizó la nobleza durante siglos.

En ese tiempo, el terremoto de Lisboa de 1755 destruyó la fortificación y fue el conde Carlos Gutiérrez de los Ríos el que mandó construir el Palacio Ducal como hoy en día se levanta. Pero la capital portuguesa no solo tuvo que ver con este edificio en su afección por el terremoto, sino que, cuando se levantó el palacio, se cree que se hizo a imagen de semejanza del Palacio das Necesidades de Lisboa -con una fachada con grandes semejanzas- y sede entonces de la Embajada de España conocida por el propio Gutiérrez de los Ríos.

La construcción del Palacio Ducal se llevó a cabo entre 1783 y 1787, ubicado en la que es hoy la plaza principal de Fernán Núñez, junto al actual Ayuntamiento, en lo alto de una colina que le erige en vigía de las tierras de la campiña que se disponen a sus pies. Fue utilizado como palacio hasta el siglo XX y declarado Bien de Interés Cultural (BIC) desde 1983, por el valor histórico y artístico de su edificio dispuesto en dos plantas rectangulares, enmarcadas por dos torreones, siguiendo la estética de los palacios del Neoclásico.

La riqueza de este enclave viene dada no solo por el propio palacio, sino por todo el conjunto que le acompaña alrededor de la plaza, con una serie de edificios que en su día pertenecieron a la misma casa y donde había molinos, caballerizas, bodegas y una escuela. Hoy en día, se conserva incluso, como muestra de todo aquello, un mesón que inició su actividad en 1670.

Estancias en dos plantas

En el interior del Palacio Ducal, propiedad del Ayuntamiento de Fernán Núñez desde la democracia y cerrado después de sufrir grandes deterioros, llama la atención la amplitud y la disposición de las distintas estancias en las dos plantas del edificio. Desde las cocinas con sus fogones, hornos y una fuente para abastecerse de agua, hasta las habitaciones de trabajo –archivo, sala de reuniones-, los comedores, salones, estancias del servicio o su propia capilla, consagrada a Santa Escolástica y rematada con una gran cúpula ovalada.

Esculturas neoclásicas que reproducen los bustos romanos y grandes pinturas en las paredes de este edificio dan cuenta del señorío y del lujo que en su época tuvo el palacio. Y otro tesoro que destaca es el que componen sus amplios jardines, que se disponen a los pies del palacio en su parte trasera, accesibles desde la planta baja y con vistas sobre ellos desde una amplia terraza en la planta alta, como un gran espacio verde que se dispone en varias alturas escalonadas en la pendiente del terreno.

Limoneros, naranjos y jazmines perfuman los jardines en el que permanece una fuente que los abastecía de agua siglos atrás. Un espacio idílico que ha sido restaurado e iluminado, conservando su disposición, y se abre al público actualmente durante los meses de buen tiempo, además de ser lugar de celebración de eventos culturales y ceremonias matrimoniales.

Ahora, tras la restauración del Palacio Ducal, el objetivo del Ayuntamiento de Fernán Núñez es hacer visitable el edificio y poder dedicarlo a usos culturales, como una manera de conservar y dar a conocer la historia guardada en este tesoro arquitectónico.