Si hay plaga vegetal, no te equivoques

Al igual que para tomar antibióticos necesitamos la receta de un médico, los tratamientos fitosanitarios deben requerir de una prescripción emitida por un técnico especializado. Así se ha defendido en la jornada celebrada por el Colegio Oficial de Ingenieros Técnicos Agrícolas de Córdoba.

“Ante una enfermedad vegetal o plaga, los técnicos son los especialistas que conocen los productos idóneos, las dosis y la duración de los tratamientos. Estamos hablando de fitosanitarios que han de emplearse con conocimiento, máxime cuando está en juego la seguridad alimentaria”, afirma Juan Carlos Burgos, Presidente del Colegio ITA de Córdoba.

En esta línea de trabajo, desde el Consejo de Ingenieros Agrícolas de España se ha hecho una relevante apuesta por el uso de nuevas tecnologías, y con la colaboración de la empresa tecnológica Agroslab, se ha creado una app para dispositivos móviles, denominada 'Agroslab asesor GIP', especialmente pensada y dirigida a técnicos que trabajan en Gestión Integrada de Plagas.

La app está conectada con el registro de fitosanitarios autorizados por el Ministerio, permite tener acceso geolocalizado a las parcelas, envía la información a otra app creada para el agricultor, valida la prescripción en el cuaderno de campo y conecta con el canal de distribución del producto, bien sean empresas privadas o cooperativas. Para fomentar el uso de esta herramienta, todos los colegiados de Ingeniería Agrícola de Córdoba y del resto de España que lo soliciten, podrán hacer uso gratuito de esta app durante el primer año.

Para completar la acción, Munitec, la Mutua de los Ingenieros Agrícolas, regalará 10 cuadernos de campo, a todos aquellos técnicos mutualistas que tengan contratado el seguro de Responsabilidad Civil para prescripción fitosanitaria, ya que la siniestralidad más alta en el sector la presentan los trabajos relacionados con GIP.

“La apuesta es integral, de ahí la implicación de tantas entidades relacionadas con la Ingeniería Técnica Agrícola. Nuestra única preocupación es contar con unos cultivos sanos y seguros”, ha concluido Juan Carlos Burgos.