Los trabajadores de Hitachi bloquean la carretera de acceso a la fábrica en Córdoba
Medio centenar de trabajadores de Hitachi Energy han protagonizado desde este mediodía el bloqueo de la avenida de acceso a la fábrica en Córdoba, después de que la empresa decidiera cerrar temporalmente las instalaciones hasta el próximo lunes.
Según informa el sindicato CCOO, la dirección ordenó el desalojo y envió a casa tanto al personal que estaba ya en su puesto como a quienes pretendían incorporarse tras participar en las cinco horas de huelga convocadas para hoy. Como respuesta, la plantilla ha llevado a cabo una sentada frente a la puerta principal con el objetivo de impedir el cierre efectivo y mostrar su rechazo a la decisión empresarial.
En la zona se han congregado decenas de personas, entre ellas el presidente del comité de empresa, Álvaro García Leiva. La Policía Nacional ha seguido de cerca la protesta, que ha cortado el acceso y la salida a la fábrica. En ella había trabajadores muy enfadados porque no les dejaban entrar a la fábrica ni para coger sus pertenencias. Finalmente, les han dejado entrar de uno en uno para coger sus pertenencias y vehículos, que han sido aparcados en los exteriores de la fábrica, donde han seguido concentrados de forma asamblearia.
La plantilla ha exigido este jueves a la empresa “la inmediata retirada de las cartas de apercibimiento que ayer entregaron al presidente y al secretario del comité de empresa”, considerando que ello es “una cuestión fundamental para retomar la negociación del convenio colectivo”, a la que “sigue abierto el comité de empresa, que lamenta la actitud beligerante de la empresa”.
A pesar de las presiones de la empresa, “cientos de trabajadores y trabajadoras han vuelto a secundar la huelga de cinco horas convocada para hoy jueves y se han sumado a la manifestación que ha recorrido algunas de las principales vías de la capital cordobesa”, a cuyo término, los manifestantes “se han encontrado con la sorpresa del cierre de la empresa hasta el próximo lunes, por lo que han decidido impedir el desalojo de las instalaciones” con una sentada en la entrada.
Antes, los trabajadores han recibido el apoyo explícito de los diputados cordobeses Rafi Crespín (PSOE) y Enrique Santiago (Sumar), así como de la subdelegada del Gobierno central en Córdoba, Ana López, “que interrumpió brevemente la reunión del Consejo Oleícola Internacional, en la que estaban presentes los ministros de Agricultura de España y Marruecos, Luis Planas y Ahmed El Bouari, respectivamente, para transmitir a los manifestantes su respaldo”.
Además, una vez más, tanto la secretaria general de CCOO Córdoba, como el secretario general del Sindicato de Industria de CCOO de Córdoba, Marina Borrego y Agustín Jiménez, han expresado su respaldo a la plantilla, participando en la manifestación y asesorando en todo momento al comité.
Esta protesta se suma al encierro que los trabajadores realizaron en la tarde de ayer dentro de las instalaciones, después de conocer que la dirección de Hitachi Energy había emitido un segundo apercibimiento disciplinario contra el presidente del comité y otro contra el secretario, por el registro horario realizado durante la primera jornada de huelga celebrada el pasado 13 de noviembre.
Desde el comité de empresa consideran que estos apercibimientos constituyen “una nueva muestra de la actitud antisindical” de la dirección y denuncian que la decisión busca “amedrentar a la plantilla” de cara a la nueva jornada de huelga convocada para este jueves. Según explican, el encierro espontáneo fue una reacción colectiva para respaldar a sus representantes y enviar un mensaje claro contra lo que interpretan como medidas disuasorias.
La empresa sostiene que los miembros del comité vulneraron la normativa interna relativa al fichaje horario. No obstante, la representación de los trabajadores insiste en que dichas normas no pueden situarse por encima de la legislación vigente y defiende que no se ha cometido ninguna irregularidad, sino que se ha ejercido un derecho reconocido.
Mientras las protestas continúan en el acceso a la fábrica, la plantilla espera una respuesta por parte de la dirección que permita avanzar en el conflicto laboral abierto desde la pasada semana.
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