La familia Bretón pide que dejen de insultarles

Un grupo de miembros de la plataforma por Ruth y José niega ante el juez que sus miembros hayan hecho pintadas amenazantes

Si la familia de José Bretón entra en la parcela de Las Quemadillas, de su propiedad, antes de abrir la puerta tiene que leer una enorme extensión de pintadas que piden, por ejemplo, la pena de muerte para su familiar, que el juez los condene a ellos también o que les pase lo mismo que supuestamente pasó con los pequeños Ruth y José, quemados en una hoguera por su propio padre, según sostiene el juez que instruye el caso. La familia Bretón dice estar cansada de ver concentraciones ciudadanos en la puerta de sus casas (en la calle Carlos Romero, en la Viñuela, vivienda de los abuelos; o en la calle Cristo, vivienda de Catalina Bretón). Por eso, han denunciado en el Juzgado de Instrucción numero dos de Córdoba las injurias y calumnias que, a su juicio, vienen sufriendo casi a diario desde que estalló el caso.

Esta mañana, los miembros de la plataforma Ruth y José denunciados por la familia Bretón han defendido ante la juez de Instrucción número dos de Córdoba que ni han calumniado, ni insultado, ni amenazado a nadie. El portavoz de este colectivo, Antonio Santiago, ha dicho que se han declarado “inocentes” de los hechos de los que se les acusa. Dicen que han convocado concentraciones silenciosas en las puertas de los domicilios de la familia Bretón y que ellos no son los autores materiales de las pintadas que pueden leerse en el muro de Las Quemadillas. Al contrario, argumentan que es cierto que las concentraciones las convocaban ellos pero que las pintadas amenazantes las escribían ciudadanos anónimos y ajenos a la plataforma.

La denuncia apunta también a distintos insultos a través de redes sociales. Los miembros de la plataforma por Ruth y José sostienen que no son ellos los administradores de algunos “perfiles falsos” que sí insultan a los Bretón y que en las páginas tanto de Facebook como de Twitter gestionadas por ellos no hay contenidos malsonantes dirigidos al entorno del que hoy es el preso más famoso de España.

Por otra parte, “sobre el incendio” registrado en la puerta de la finca por los peluches colocados, dice que “cuando terminó la concentración se retiraron todos los peluches, pero la gente continuó yendo a poner peluches y velas, y eso ya no estaba convocado por nosotros”, de modo que “se incendió accidentalmente y así lo dicen la policía y los bomberos”. Igualmente, la juez ha cuestionado por qué se concentran “delante de las casas” de la familia paterna, a lo que el portavoz contesta que se concentran “para hacer las mismas preguntas que el juez y la policía para que pudieran aportar información, además de pidiendo ayuda”.

Por la Audiencia Provincial de Córdoba ha pasado también la familia de José Bretón, sus padres y su hermana, para corroborar las denuncias. El hermano de José Bretón, Rafael, ya consiguió que un juez dictara una orden de alejamiento contra familiares de Ruth Ortiz, la madre de los pequeños, que no paraban de acosarle cada vez que salía de su casa en la localidad sevillana de Tomares.