Boaventura de Sousa Santos: “La persona humana está en peligro, pero no por el transhumanismo”
La humanidad enfrenta una encrucijada crítica en la que sus acciones y decisiones tienen un impacto directo en la vida del planeta. Boaventura de Sousa Santos manifiesta que “a pesar de que nuestra existencia solo representa el 0,01 % de la vida total en la tierra, hemos asumido un papel dominante que afecta a toda la vida no humana”.
Sousa Santos es un destacado intelectual portugués, reconocido y con gran influencia a nivel mundial debido a su importante contribución en la reevaluación de las epistemologías de las ciencias sociales y humanas. Su obra ha sido fundamental para analizar de manera crítica las problemáticas del mundo globalizado, resaltando sus desequilibrios y promoviendo la búsqueda de equilibrios más justos.
La naturaleza ha enviado claras advertencias sobre la necesidad de cambiar nuestros patrones de producción, consumo y estilo de vida si queremos asegurar la supervivencia de la vida humana en el planeta. En esta encrucijada, emerge el concepto del transhumanismo, “un movimiento filosófico curioso porque presenta como utopía lo que, en mi opinión, será una distopía”, añade Boaventura de Sousa Santos.
Esta filosofía plantea mejoras cualitativas para la humanidad, como longevidad, estados psíquicos y capacidades, a través de la tecnología. Sin embargo, este enfoque puede llevarnos a una distopía, ya que estas mejoras podrían quedar en manos de unos pocos debido a la lógica propietaria, excluyendo a la mayoría de la población. Las promesas utópicas del transhumanismo contrastan con la visión dialéctica del doctor en Sociología del derecho, Boaventura de Sousa Santos, que advierte sobre el miedo inherente a la esperanza y la contradicción en la evolución histórica.
Asimismo, en el contexto de la pandemia mundial, se plantea una reflexión sobre la interacción entre la humanidad y la naturaleza. La pandemia de coronavirus ha sido interpretada como un mensajero y un pedagogo, una señal que nos invita a repensar nuestras prácticas y valores. En ese sentido, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha advertido que el calentamiento global provocará un aumento significativo de refugiados ambientales en el futuro, ya que el rango de temperaturas habitables se reducirá cada vez más.
Reflexiones de Boaventura de Sousa Santos sobre el futuro de la humanidad
“El encuentro de la pandemia con la cuarta revolución industrial subraya la fragilidad humana, a pesar de los avances tecnológicos”, afirma Sousa Santos. Recordemos cómo los colonizadores europeos llevaron la viruela a América, diezmando a los pueblos originarios que carecían de inmunidad, y cómo las vacunas representan un avance importante en ese dominio desde entonces. Este hecho histórico resalta la importancia de actuar de manera responsable y sostenible en nuestro presente.
El mundo enfrenta desafíos cruciales en relación con la sostenibilidad y el transhumanismo. Puesto que, “la humanidad debe reconocer su interdependencia con la naturaleza y adoptar prácticas y políticas responsables para asegurar un futuro viable para todos”, asegura Boaventura de Sousa Santos. El respeto por la vida no humana, una política ecológica y la búsqueda de la justicia social son fundamentales para superar estas encrucijadas y construir un mundo más equitativo y sostenible. La humanidad tiene la responsabilidad de hacer frente a estos desafíos, recordando que nuestra existencia en el planeta es frágil, pero también poderosa si tomamos decisiones conscientes y sostenibles.
Además, nuestras sociedades continúan dividiéndose entre aquellos considerados plenamente humanos y aquellos que son marginalizados y deshumanizados debido a su raza, género o condición. De este modo, Boaventura de Sousa Santos afirma que “la humanidad es un proyecto, no una realidad. Si fuera una realidad, la muerte de los 20.000 inmigrantes y refugiados ahogados en el Mediterráneo en los últimos años provocaría una conmoción política y social tan fuerte como la que se produciría si murieran 20.000 ciudadanos alemanes o suecos”.
En este sentido, el reconocido sociólogo, Sousa Santos, aboga por una política democrática y progresista. Asimismo, reconoce que es necesario un cambio profundo en nuestros patrones de desarrollo, consumo y relaciones sociales para abordar los desafíos actuales. En lugar de aspirar a una utopía transhumanista, el enfoque debe ser el bienestar sostenible de toda la humanidad y del planeta.
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