El Club Fidias, natación por y para todos

El deporte, en esencia, como acto de superación. De compañerismo. De puro disfrute. De equipo. Como oasis ante cualquier adversidad. Como palanca para derribar barreras. Dadme un punto de apoyo y moveré el mundo, dijo un día Arquímedes. Así se hizo y eso mismo debieron pensar en su día en el CN Fidias Natación Integral. Dadme una piscina y me veréis bañarme en metal. Dicho y hecho. La filosofía del conjunto cordobés ha ido adquiriendo valores competitivos con el paso del tiempo y con el propio trabajo de sus componentes. Desde la inclusión. El empuje de todos. Hacia lo más alto. La receta del éxito de una entidad hecha a sí misma a base del empeño de un colectivo que ya es una familia.

Y es que ese es el término que se ha acuñado como distintivo de una entidad que, con esfuerzo y sacrificio, ha logrado levantar una voz propia dentro del panorama nacional de la natación adaptada. Fue en 1995 cuando se puso en marcha el Fidias, a raíz del Programa de Natación Utilitaria que se desarrollaba en Vista Alegre, y ya desde el primer momento nacía adscrito a la Federación Andaluza de Deportes para Personas con Discapacidad Física. Una entidad sin ánimo de lucro cuyos primeros pasos los da en la natación y en las actividades acuáticas, aunque posteriormente pasaría igualmente a incluir otros deportes como el pádel o la escuela de Boccia en 2021, pasándose a denominar Club Fidias Deporte Inclusivo.

Un hueco más amplio dentro del tejido deportivo de la ciudad, y que a base de esfuerzo, trabajo y talento, se ha erigido como un referente a nivel andaluz y nacional, y ha servido como ejemplo y como punto de apoyo para el crecimiento de la disciplina en España, lo que ha posibilitado que en otros puntos del país surjan iniciativas similares que no han hecho más que subir el nivel. Uno de los técnicos fundadores de la entidad es Alfonso Otero, actual gerente del club, y quien subraya a CORDÓPOLIS que el propósito de la creación era “poder ir con los chavales que teníamos en ese momento a los campeonatos autonómicos y nacionales”.

En este sentido, los primeros pasos se dieron con dos deportistas, aunque los propios éxitos del club y el trabajo continuo de sus integrantes han propiciando un crecimiento notable que les ha permitido alcanzar a día de hoy más de 80 participantes en su cantera, siendo más de una veintena de ellos pertenecientes al alto rendimiento. Son numerosas las medallas en torneos andaluces y nacionales. Con todo, Esperanza Jaqueti, entrenadora del club, admite que la pandemia les afectó “bastante”, ya que “ellos son población de riesgo y hubo muchos que tuvieron un miedo más acrecentado”, mientras que “los que son más de alto rendimiento venían y cumplían todo el reglamento a rajatabla”. Eso sí, reconoce que “en septiembre hemos visto que han vuelto muchos de los que el año pasado no aparecieron y ya parece que nos empezamos a reconstituir”.

Una cantera exitosa en lo deportivo y en social. Inclusiva por encima de todo y de la que han ido naciendo (y seguirán surgiendo) multitud de campeones de Andalucía y de España. Y es que todos se forjan al abrigo de Miguel Ángel Martínez Tajuelo, el gran exponente de la entidad y uno de los mejores nadadores adaptados de la historia de España, pues en su currículum figuran participaciones en Juegos Paralímpicos, Mundiales y Europeos.

“Tener una figura como Tajuelo en el club, a ellos les supone ver de cerca una persona que ha llegado a cuatro Juegos Paralímpicos, y que, si él puede, ellos también, y, además, Tajuelo se lo dice así: si yo he llegado, tú también puedes”, expone Jaqueti.

Así se forjan y progresan más de 20 años de trayectoria en la natación adaptada. Más de dos décadas de experiencias, con centenares de jóvenes que han pasado por un club que trabaja por y para todos. Con un lema presente, la inclusión por encima de todo. Y a disfrutar bajo el agua brazada a brazada. Una carrera acuática de pura superación, de sacrificio. Nadar para vencer obstáculos, donde el único límite sea el que uno mismo se imponga.