Una historia de verdad, Adesal toca el cielo

El conjunto de Rafael Moreno, que ha sido recibido por el Alcalde en el Ayuntamiento, busca financiación para consolidar su proyecto en la máxima categoría del balonmano femenino

No son las más conocidas, pero han realizado méritos para ello. El conjunto cordobés de balonmano femenino Adesal alcanzó el pasado fin de semana la cota más elevada a la que ha podido aspirar en toda su historia. Las féminas que dirigue Rafa Moreno han tocado el cielo después de un fin de semana glorioso en Valladolid que les ha permitido alcanzar la ABF, la Division de Honor de dicha disciplina deportiva.

Leire Blázquez, una de las veteranas y capitanas del equipo, ha vivido en sus propias carnes el peso de dicha cota. La jugadora, que recibió un fuerte golpe en el ojo izquierdo en el transcurso del último partido de la fase de ascenso, asegura mostrarse “muy feliz por el trabajo desarrollado en los últimos años”.

El equipo, inmerso en una coyuntura de celebración, sin embargo, está pendiente de algo que no le compete. Porque ahora, una realizado lo más difícil, toca hacer números. Y es que el deporte parece que queda en un segundo plano a tenor de los avales que hay que manejar para sostener a un equipo en la elite de un deporte.

Le ha ocurrido al ARS Palma del Río durante la presente temporada en la Asobal, y le puede ocurrir también al Ángel Ximénez (recién ascendido a la misma categoría). El respaldo económico parece más necesario que nunca. “Confiemos en que lo logrado sirva para algo”, concreta Blázquez. La madrileña, una de las imprescindibles en las alineaciones de Moreno, no las tiene todas consigo.

Conocedora de que ahora toca negociar y buscar sponsor, el equipo peregrina en la incertidumbre hasta que de una vez su organigrama institucional y técnico se vincule a un proyecto sólido y con respaldo de quienes sean capaces de invertir para que, un año más, el nombre de Córdoba se pasee por gran parte de la península.

Y es que gran parte de estas chicas (que no todas), viven de este deporte. Lo hacen compartiendo pisos, con sueldos básicos y en circunstancias más que desfavorables con respecto a otros deportes. Pero son la elite. Todas constituyen un ejemplo de superación donde el sacrificio conjunto y la perseverancia se fraguan conformando un todo cargado de verdad deportiva. Su historia merece un respaldo. Su hazaña es un hito.