La garra del Ángel Ximénez no basta en Valladolid

El sueño está ahí y es uno de los grandes motivos por los que los profesionales se levantan día a día. El afán de superación, de llegar a ser el mejor en tu deporte, el no cansarte nunca de lo que haces diariamente... Son muchos los incentivos de una plantilla del Ángel Ximénez de Puente Genil que ya ha logrado dejar a un lado el discurso de que lo importante es la salvación para tratar de superar sus registros temporada tras temporada. Esta vez, la posibilidad de los puestos europeos era remota, pero muy posible a falta de ocho jornadas para terminar el campeonato regular, algo impensable años atrás. Aun así, los de Paco Bustos tenían que conseguir una victoria que no llegó sobre suelo vallisoletano.

La oportunidad de dar un claro paso al frente para tratar de ser esa figura ambiciosa que requería tanto la afición como el propio club. Es por ello que el Ángel Ximénez de Puente Genil salía a la pista del Polideportivo Huerta del Rey con la ilusión de un equipo compacto a pesar de las bajas y la última incorporación de la perla Ferrán López. Gracias a esto, el conjunto pontano dominó en los primeros instantes del partido, con un Recoletas Atlético Valladolid que no se vio sorprendido por ese ímpetu inicial, pero que sí le costó mantener el ritmo impuesto por los visitantes.

Sin embargo, todo cayó por su propio peso conforme la primera parte siguió su curso. Los chicos dirigidos por David Pisonero se acomodaron en su propia pista y llegaron al ecuador de este periodo no solo por delante en el marcador, sino también imponiendo una ventaja que consolidaron hasta antes del paso por vestuarios. Tras ello, el Ángel Ximénez de Puente Genil tenía que responder a este golpe tan duro por parte del cuadro vallisoletano y tenía el descanso para que Paco Bustos encontrara la solución a un problema que no se terminó de resolver en la segunda mitad.

Y es que todo parecía que sí, que había despertado un cuadro pontano que recortó la distancia en tan solo un parcial, llegando a ponerse a tan solo un gol, pero no sirvió prácticamente de nada, porque el último periodo fue un calco del primero, con un Recoletas Atlético Valladolid que volvió a imponer un ritmo que en los primeros instantes no pudo seguir el Ángel Ximénez de Puente Genil y ese lastre le condicionó hasta que sonó la bocina del Polideportivo Huerta del Rey. Por ello, los chicos dirigidos por Paco Bustos se despiden casi de la zona europea, aunque con la salvación muy bien encaminada para certificarla en próximas jornadas.