Ariadna Carrasco se corona en una histórica XX Carrera de la Mujer
Córdoba ha vivido este sábado una auténtica fiesta del deporte y la igualdad con la celebración de la XX Carrera de la Mujer por la Igualdad. En una edición cargada de simbolismo por su vigésimo aniversario, la atleta Ariadna Carrasco Plata se alzó con la victoria tras dominar el recorrido de 6 kilómetros y cruzar la meta con un tiempo de 23:40. La prueba, que partió a las 19:30 horas desde las pistas de El Fontanar, volvió a consolidarse como una de las citas más veteranas y participativas de su categoría en toda España.
Y es que el pronóstico abierto que se preveía se decantó a favor de Carrasco, quien cumplió con su papel de favorita. Tras ella, el podio lo completaron dos de los grandes nombres del atletismo cordobés. La segunda posición fue para Yolanda Villalba Evans, del Trotasierra Hornachuelos, que firmó un crono de 24:14. El tercer cajón lo ocupó Ana Araceli Moreno García, del Indea, con un tiempo de 24:29. Muy cerca de los puestos de honor finalizaron Blanca Sánchez Medina (Córdoba Patrimonio CAC), en cuarta posición con 24:55, y Virginia Moya Armenteros (Indea), quinta con un registro de 25:02.
Más allá del resultado puramente competitivo, el gran éxito del evento fue su carácter participativo y reivindicativo. Con cerca de 1.300 inscripciones, mujeres y hombres corrieron y caminaron juntos por un circuito urbano que recorrió el entorno de la Ribera y la Puerta del Puente, en una jornada que, como señaló la teniente de alcalde delegada de Igualdad, Marian Aguilar, en la presentación, es “una buena oportunidad para visibilizar a la mujer y al deporte femenino, y para concienciar de la necesidad de seguir trabajando por una Córdoba más igualitaria”.
El Club de Atletismo Califas, como organizador del evento, dispuso una vez más de una organización impecable para una prueba que, según su propio reglamento, tiene un carácter competitivo para las mujeres a partir de la categoría cadete, mientras que los hombres inscritos participan de forma no competitiva. De este modo, la XX Carrera de la Mujer no solo celebró el deporte, sino que se convirtió en una magnífica simbiosis de fiesta, unidad y compromiso para avanzar en la igualdad.
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