Goteras y suelos en mal estado que provocan lesiones dentro del Conservatorio Luis del Río
Goteras que provocan charcos en suelos diseñados para bailar y suelos con socavones que provocan lesiones de forma constante. Son solo algunos de los desperfectos a los que se enfrentan a diario los casi 600 estudiantes del Conservatorio de Danza Luis del Río, un centro cuyo alumnado y equipo directivo se ha movilizado este lunes para pedir a la Delegación de Educación que actúe para mejorar las instalaciones.
El Conservatorio Profesional Luis del Río de Córdoba se creó en 1966, impulsado por el gran bailarín del que toma su nombre y que fue el primer profesor titulado en Danza con oposición de Andalucía. En el año 1984, este centro pasa a depender de la Junta de Andalucía, y es uno de los siete Conservatorios Profesionales de Danza que hay en la comunidad autónoma. Por sus aulas han salido numerosos alumnos que han hecho carrera en el mundo de la danza, así como varios premios nacionales -Antonio Ruz, Olga Pericet, por nombrar a los dos últimos en ganarlo-.
Se trata, por tanto, de un centro de enseñanza con prestigio e historia a nivel nacional que, además, el año pasado celebraba el centenario del nacimiento de su fundador. A pesar de ello, la comunidad educativa y la Asociación de Madres y Padres del conservatorio se han movilizado para denunciar el nulo interés de la Delegación de Educación de la Junta de Andalucía en poner solución a los problemas y deficiencias que presenta el centro.
Los más llamativos son los que van asociados a las goteras que afectan a varios puntos de este edificio, y que habitualmente provocan charcos. El problema es más grave cuando los charcos se forman en las aulas donde se baila, ya que pueden provocar deslizamientos y lesiones.
Los vídeos a los que ha podido acceder este periódico muestran varios casos de goteras en estas aulas, que impiden el correcto desarrollo de las clases. También muestran goteras de las que cae agua profusamente en pasillos y zonas de taquillas, o en el patio, que está cubierto.
En cuanto a los suelos de este centro, que son la parte más importante para el aprendizaje de una disciplina como la danza, se puede apreciar que los daños son habituales, como habituales son las lesiones asociadas a este mal estado.
Según el presidente de la Ampa, Enrique Graciani, en los dos primeros meses del curso ya se han registrado entre 15 y 20 lesiones, lo que evidencia la urgencia de mejoras en las instalaciones.
“Sabemos que cambiar los suelos son 375.000 euros pero es que hay que hacerlo, es que no es serio ni profesional bailar en estas condiciones”, afirma el presidente de la AMPA, quien afirma que hay alumnos que se han licenciado con una lesión provocada por el mal estado de las instalaciones, y asegura que las quejas sobre este estado llevan en la Delegación de Educación desde hace siete años, sin que las hayan atendido, al igual que tampoco se da solución a la falta de climatización de la que hace gala todo el edificio.
La respuesta de la Junta
Desde la Delegación de Educación, consultada por este periódico, han señalado que el conservatorio, “al igual que otros centros educativos situados en la zona histórica, no han podido ser incluidos en los últimos planes de bioclimatización debido a razones arquitectónicas”.
Respecto a las diferentes deficiencias, la Junta ha sostenido que el centro recibirá en breve una partida máxima de 19.000 euros para solventarlas. “El suelo fue sustituido (en 2012 en dos aulas y en 2020 en una tercera) según los requisitos técnicos exigidos por el equipo directivo, aunque desconocemos su mantenimiento así como su uso fuera del centro educativo para otro tipo de actividades”, afirman desde la delegación.
Por último, afirman que en 2019 se recibió una petición de la dirección del centro solicitando el turno de mañana sin ninguna petición extra, la cual tampoco es necesaria en cuanto a horario de apertura ya que el centro cuenta con dos ordenanzas y un peón, que también puede realizar labores de ordenanza según el VI Convenio Colectivo del Personal Laboral de la Junta de Andalucía.
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