El Gobierno envió el 26 de diciembre la autorización condicionada para dotar de alta tensión al bombeo de La Colada

El pasado 26 de diciembre, el subdirector de Proyectos, Obras y Explotación de Acuaes (la empresa pública que se encarga de las obras en la cuenca del Guadiana), José Piñeiro Aneiros, remitió un escrito dirigido a la empresa pública Aguas de Córdoba (Emproacsa) en la que le informaba de que la Diputación ya disponía de los permisos necesarios para dotar de alta tensión al bombeo del embalse de La Colada. Eso sí, es una autorización condicionada aún a que se aporte una serie de documentación complementaria que se ha solicitado a Emproacsa y a la Junta y en la que se está trabajando.

Actualmente, el bombeo de agua de La Colada a Sierra Boyera se hace gracias a dos grupos electrógenos, que ya sufrieron averías este verano. Este sistema es provisional y estaba pendiente de la autorización definitiva para conectar la estación de alta tensión de Los Pelayos, en el norte de la provincia de Córdoba, con la estación de bombeo de La Colada. Esto permitirá evitar futuras averías y también abaratar el coste del sistema. El actual necesita combustible diesel y, por tanto, es más caro que una línea eléctrica convencional de alta tensión.

En el escrito, el responsable de Acuaes le informa a la Diputación que dispone de toda la documentación desde el 11 de diciembre, después de la solicitud que realizó el día 5 de ese mismo mes. La autorización firmada por el Ministerio de Transición Ecológica se produjo a finales del mes de noviembre. Así, una vez que se completen todos los trámites y permisos y tendrá que ser Emproacsa quien inicie las obras para construir una línea de alta tensión de unos cinco kilómetros de longitud.

Ese mismo día comenzaron los trabajos previos al proyecto que está desarrollando Emproacsa y la Junta de Andalucía para intentar aumentar la potencia de potabilización de Sierra Boyera y que los vecinos de la zona norte puedan volver a beber el agua que sale del grifo de sus hogares. Desde abril del año pasado, sale agua pero no es apta para consumo humano. El problema está en la contaminación por años de vertidos en La Colada y la falta de capacidad de Sierra Boyera para potabilizar el agua.