El Gobierno da luz verde a la megaplanta fotovoltaica en Cabra pese a la oposición vecinal
El Boletín Oficial del Estado (BOE) ha publicado este martes 7 de octubre la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) favorable para el proyecto de una megaplanta fotovoltaica Ágata, una de las tres grandes instalaciones energéticas previstas para el término municipal de cabra. La resolución supone que el Gobierno de España de luz verde a un proyecto que ha supuesto un profundo malestar entre los residentes de Las Huertas de Cabra, quienes se movilizaron en contra de la masificación de estas plantas durante el pasado mes de mayo. Aun así, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico ha aceptado esta petición con una serie de condicionantes que debe cumplir la empresa.
La planta Ágata contará con 51 megavatios de potencia instalada y se ubicará en Cabra, ocupando cerca de 150 hectáreas. Su construcción está prevista para 2027, en las inmediaciones de Las Huertas de Cabra. Es por ello que los vecinos de esta pedanía han sido los protagonistas en unas manifestaciones debido a que las instalaciones estarán cerca de sus viviendas. Además, el descontento se ha centrado, en gran parte, al arranque de decenas de hectáreas de olivar, afectando a una zona de producción agrícola históricamente productiva en Córdoba.
Sin embargo, la DIA ha concluido que este proyecto es viable, pero, en cambio, debe desarrollarse bajo estrictas normas ambientales, entre las que se incluyen:
- Protección del Suelo: Se prohíbe la nivelación del terreno en las zonas de implantación de paneles solares.
- Fauna: Se establece un calendario restrictivo, prohibiendo el inicio de las obras en el periodo de reproducción -entre marzo y julio-. El promotor también deberá elaborar un programa de medidas compensatorias específico para la mejora del hábitat de especies como el alzacola rojizo, el milano real y el cernícalo vulgar.
- Proximidad: Para mitigar el impacto visual y la fragmentación, el promotor deberá realizar la naturalización completa del vallado perimetral mediante vegetación autóctona, además de la creación de nuevas barreras vegetales para mitigar el impacto visual para los usuarios de carreteras y vías pecuarias próximas.
- Vigilancia Ambiental: La DIA exige un Programa de Vigilancia Ambiental que deberá ser aprobado por el órgano autonómico competente y que incluirá el seguimiento de las poblaciones de fauna y el control de colisiones y electrocuciones de aves durante toda la vida útil de la instalación.
A pesar de las visibles protestas ciudadanas, la documentación formal del trámite de información pública del proyecto, según consta en el BOE, señala que no se recibió ninguna alegación durante el periodo de exposición pública. De hecho, la Diputación de Córdoba y el Ayuntamiento de Cabra, como entidades públicas, no contestaron, y solo recibió el apoyo de Ecologistas en Acción y BirdLife.
La aprobación de Ágata se suma al contexto de fuerte concentración de fotovoltaicas en la zona, donde junto a Zafiro y el más avanzado Óleo Solar (75 MW), se suman un total de 170 MW proyectados.
Por su parte, los vecinos han recibido la noticia con incredulidad, ya que, hace apenas dos semanas, una concelaja del Ayuntamiento de Cabra se reunió con ellos y les explicó que no se iba a construir la megaplanta fotovoltáica de Ágata. Sin embargo, la DIA ha llegado el 7 de octubre en el BOE y ahora se aceleran los trámites para realizar una gran manifestación en busca de parar la llegada de esta instalación.
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