Vecinos del casco histórico se plantan: “Ni una barra en la calle más”

La Asociación Vecinal La Fuenseca, Santa Marina y Orive ha celebrado un encuentro vecinal “ante lo vivido (y sufrido) en las últimas semanas, hechos que atentan gravemente contra la convivencia” y ante la próxima reunión el 21 de octubre de la Comisión de Cruces en el Ayuntamiento, tras el que hacen llegar al Consistorio sus reivindicaciones. Y entre ellas, en lo referido a verbenas y las barras anunciadas para Navidad, se han plantado: “Ni una barra más en las calles del Casco Histórico, ni subvencionada ni autorizada por nuestro Ayuntamiento”.

En un escrito remitido a los medios de comunicación, sobre “las verbenas y los botellones”, saludan la celebración de la Comisión de Cruces próximamente “para abordar con decisión las soluciones que requiere una cuestión que es compleja pero que necesita intervención rápida y efectiva”. Recuerdan que “ya se puso de manifiesto el problema, que algunos negaban, con motivo de la celebración de las Cruces de Mayo”.

Y denuncian cómo “se ha vuelto a repetir con el invento, o re-invento, del programa de verbenas, con el resultado conocido que no sería necesario volver a relatar”. Además, critican que “el mismo día que se pide disculpas por las incidencias repetidas cuando se hace lo mismo que la vez anterior, se nos anuncia que en Navidad se piensa volver a repetir. Reclamamos, con la mayor firmeza: Ni una barra más en las calles del Casco Histórico, ni subvencionada ni autorizada por nuestro Ayuntamiento. Los vecinos ya sabemos celebrar la Navidad. Bienvenidos los belenes, los coros, los pasacalles, la iluminación extraordinaria, pero ni una barra más”, reiteran.

En relación a la limpieza del casco histórico, señalan que se encuentran con “suciedad, bolsas, plásticos, botellas rotas, orines por todas partes, por no entrar en más detalles. En el mejor de los casos, papeleras desbordadas durante días”. Piden que, “ante acontecimientos extraordinarios, por muy no deseados que sean, Sadeco debe implementar soluciones extraordinarias y urgentes. Costosas, pero imprescindibles. Y que solo tienen valor si son de respuesta inmediata”.

Por ello solicitan “un mecanismo de previsión suficiente para que precisamente en fines de semana, sábados y domingos, Sadeco pueda tener capacidad de atender la limpieza que necesitan nuestros barrios”.

En cuanto a la seguridad en este entorno, “se ha observado y denunciado por los vecinos una insuficiente respuesta de nuestra Policía Local”. Critican “desde el laberinto de teléfonos de atención (092, 112, Aytº) que a las horas en que se necesitan terminan en nada, hasta la ausencia de una intervención verdaderamente eficaz y correctiva de los desmanes que se producen”.

Exigen que la Policía Local evite aglomeraciones que cortan el tráfico de vehículos y peatonal, con la consiguiente falta de acceso de los vecinos a viviendas y cocheras; que intervenga ante el consumo de alcohol por menores en la vía pública y en el control de la venta de alcohol a estos menores en establecimientos; y sancionar con multas “realmente disuasorias” estas actuaciones. “Contribuirá, sin duda, a que haya menos consumo de alcohol, menos bolsas y botellas tiradas y menos orines en las fachadas”. Y apuntan que “si nuestra Policía local necesita más dotación de efectivos o medios, e instrucciones serias y precisas, hágase por quien corresponda”.

Asimismo, señalan que “la educación, académica y familiar, es parte importante del fenómeno del botellón en nuestros adolescentes”. Por lo que proponen que la Delegación de Infancia y Juventud lidere un programa de explicación en los institutos, públicos, concertados y privados, sobre el consumo de alcohol y la obligación de la limpieza“.

Con todo, los vecinos que viven en el Casco Histórico reivindican “nuestro derecho a hacerlo con dignidad y servicios, en las mejores condiciones. Somos quienes hacemos un Casco Histórico vivo, con valores, que defendemos nuestro Patrimonio material e inmaterial, que hacemos posible con las ventajas y servidumbres que a veces soportamos, que la ciudad -junto con la actuación de las Administraciones- sea reconocida en el mundo y se convierta en fuente de la actividad económica asociada al turismo”.

Y advierten que “las declaraciones Patrimonio de la Humanidad no son incondicionales, al igual que se consiguen hay que mantenerlas, con barrios vivos, con condiciones de habitabilidad (lema del Congreso de la OCPM) que atraigan población en lugar de expulsarla. Queremos un Casco Histórico habitable para los cordobeses, a la vez que amable para nuestros visitantes. Manifestamos nuestro compromiso con toda la ciudad, implicándonos en todos los aspectos que sean necesarios”.

Por lo que reclaman al Ayuntamiento un proceso activo de escucha y de intervención y atención a quienes habitan realmente el Casco, pasando de la visión como “escenario inigualable” o “marco incomparable”, a la de barrios tradicionales donde sus habitantes piden “condiciones de vida, de movilidad, de seguridad, de servicios, habitabilidad, bioclimáticas, ... equiparables a lo que demandan en este siglo”.

Responsabilidades políticas: cese del concejal Ferias y Tradiciones

En su escrito, los vecinos señalan que en su estructura, el Ayuntamiento decidió incluir una Delegación de Ferias y Tradiciones, “lo que nos ha deparado un Delegado expresamente dedicado a esta tarea. El resultado, sin embargo, y a la vista está, es que la cosa ha ido a peor progresivamente y los vecinos del Casco Histórico no entendemos cómo se puede tropezar en la misma piedra tantas veces, a pesar de las advertencias, privadas y públicas”.

Por ello, “nos reafirmamos y con todo el respeto institucional y el reconocimiento a la autoridad de nuestros representantes electos y de las competencias que le asisten, así como el máximo respeto a las personas y sin poner en duda la buena voluntad que se les supone, pedimos a nuestro alcalde el relevo inmediato del Concejal de Ferias y Tradiciones de estas funciones, y en todo caso su asignación donde menos daño haga”.