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El detenido en Las Tendillas presenta una denuncia contra la Policía por una presunta agresión

Lesiones en la espalda de la persona agredida.

Cristian López

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Una novedad más en el asunto relativo a la persona detenida este domingo en Las Tendillas por la Policía Nacional en plena fiesta de celebración del ascenso del Córdoba CF. El mismo, como ya adelantó este periódico, ha decidido presentar una denuncia por medio de un familiar contra los cuerpos de seguridad por la presunta agresión recibida durante las cargas policiales, y que ha provocado que se encuentre actualmente ingresado en Reina Sofía, con un hematoma en el ojo y un derrame en la cabeza, además de otras lesiones corporales.

La persona denunciante expone en el documento al que ha tenido acceso Cordópolis que todo ocurrió, como se ha dicho, durante los actos de celebración, y fue a partir de las 23:30 cuando comenzaron dichas cargas. En ese momento, según se manifiesta, los hermanos Ousama y Bilal, junto a un amigo, se encontraban en Las Tendillas cuando, a partir de esa hora, uno de ellos dijo que era buen momento para marcharse, debido a que tenía que trabajar al día siguiente.

“Poco después a cuando decidieron los tres marcharse del lugar, escucharon dos detonaciones, por lo que Bilal agarró a Ousama de la mano, momento en el que se aproximó de forma súbita un agente de Policía Nacional”, quien “agarra fuertemente a Ousama de la espalda, golpeando a la vez a Bilal dos veces en la mano con la porra para que este soltara a su hermano”, detalla el escrito presentado en comisaría. Asimismo, el mismo incide que, tras esto, “el mismo Policía golpea a Ousama en la cabeza y espalda varias veces, hasta que pierde momentáneamente el conocimiento”. Además, según Bilal, dicho agente golpeó una de las veces en la zona del ojo, lo que originó el citado hematoma.

A continuación, el hermano del presuntamente agredido por la policía y su amigo obversan como los agentes se lo llevan “a rastras” hasta un furgón y allí lo detienen, y fue entonces cuando este “recupera la noción, recibiendo golpes en la cabeza y espalda por varios policías”.

El relato de los hechos continúa exponiendo que el detenido fue sacado del furgón e introducido en otro vehículo que se lo llevó finalmente del lugar. De ahí fue ingresado en Reína Sofía. En un primer momento, según la denuncia, durante la madrugada se informó a los familiares que el detenido estaba bien y que, tras hacerle varias pruebas, iba a ser trasladado a comisaría para tomarle declaración. Sin embargo, pasadas las horas sigue ingresado. Es más, a las 13:00 del día siguiente, “estando con Bilal en la misma puerta de urgencias del hospital, requiriendo más información, sale otro policía que les dice que se marchen del lugar o los van a detener, todo ello de malas formas”.

Posteriormente, la persona ingresada es trasladada a la planta de neurocirugía y, ya por la tarde, los cuerpos policiales abandonan el centro sanitario, momento en el que los familiares pudieron entrar en la habitación. Así, los médicos informan que éste “va a ser intervenido de la fractura orbital y que si en 48 horas no se reduce el derrame, igualmente puede que tengan que intervenirle”, apostilla la denuncia.

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