Los bomberos instalarán 300 detectores de humo en hogares de personas mayores vulnerables

Los bomberos del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS) de Córdoba instalarán 300 detectores de humo cedidos por la Fundación Mapfre en hogares de personas mayores vulnerables ante un incendio por vivir solas o con dificultades de movilidad. Esta iniciativa se lleva a cabo en tres ciudades de España: Córdoba, Alicante y Oviedo.

El delegado de Seguridad del Ayuntamiento de Córdoba, Miguel Ángel Torrico, la delegada de Servicios Sociales, Eva Contador, el jefe de los bomberos de Córdoba, Daniel Muñoz, junto a Antonio García Infanzón, responsable del Área de Prevención y Seguridad Vial de Fundación Mapfre, y Gabriel Muñoz, director de la Asociación Profesional de Técnicos de Bomberos, han presentado esta iniciativa conjunta.

Los bomberos instalarán los 300 detectores de humo en las casas de personas mayores con las que se trabaja habitualmente desde los Servicios Sociales comunitarios. El detector de humo es un aparato autónomo que dispone de batería con tres pilas con tres años de duración, que se instalará en el techo de la vivienda, ya que el humo de un incendio asciende siempre. El aparato emite un sonido fuerte cuando detecta el humo, que puede darse “ante un olvido cocinando o en un incendio nocturno cuando dormimos”, ha señalado el jefe de los bomberos de Córdoba. “El 50% de los incendios en vivienda en Córdoba suceden en el salón, el 35% en los dormitorios y el 15% en la cocina. El detector se instalará en zonas comunes donde tenga mayor rango de captación”.

“Hay una mayor incicencia de incendios en hogares de personas mayores, que viven solas o tienen algún tipo de discapacidad, y que muchas veces, cuando se dan cuenta del incendio, pues ya requiere una intervención mayor de los bomberos”, ha explicado Torrico.

De hecho, según los datos aportados desde la Asociación Profesional de Técnicos de Bomberos, el informe sobre víctimas de incendios en España en 2021 señala que murieron 154 víctimas en incendios en vivienda, de las que 41 fueron en Andalucía y 5 en la provincia de Córdoba. “Lo más llamativo es que más del 50% fueron personas mayores 65 años y la mitad vivían solas o tenían dificultades de movilidad”.

Por eso, con esta iniciativa se trabaja “con este sector de la población para evitar estas situaciones que traen como consecuencia vidas perdidas”.

La iniciativa parte del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento de Córdoba que irá instalando los detectores de humo en coordinación con Servicios Sociales, que contactará con las personas más vulnerables en sus hogares para recibir estos aparatos. “Un detector de humo puede ser la diferencia entre vivir o no vivir”, han advertido las entidades que colaboran en esta acción.