Desmantelada una red de trata de mujeres cuyos servicios pedían hombres durante el confinamiento

La Policía Nacional ha desmantelado una organización criminal de trata, en el marco de una operación en la que ha detenido a siete personas como presuntos autores de un delito de trata de seres humanos y ha liberado a 12 mujeres, una de ellas menor de edad, que estaban siendo víctimas de explotación sexual en Córdoba y Jaén, y que habían sido captadas en Colombia.

“Nuestras unidades especializadas en la lucha contra la trata han desarticulado una red internacional que explotaba sexualmente a mujeres, siendo liberadas 12 víctimas en Córdoba y Jaén, alguna de ellas menor de edad. La organización desmantelada continuaba la actividad incluso tras ser decretado el estado de alarma”, ha explicado el Comisario Principal de la Policía Nacional, José García Molina, este viernes 10 de abril durante la rueda de prensa posterior a la reunión del Comité de Gestión Técnica del Coronavirus.

Según ha precisado, “a pesar del confinamiento, muchos clientes solicitaban los servicios sexuales acudiendo a los pisos en que se encontraban las mujeres o reclamaban que estas se desplazaran a sus propios domicilios”.

La investigación se inició gracias a las declaraciones de dos mujeres colombianas que manifestaron que habían sido engañadas para viajar a España con la promesa de un empleo realizando labores domésticas. Una vez en el país comenzaron a sufrir amenazas y violencia física y fueron obligadas a ejercer la prostitución para pagar la deuda que habían contraído con la organización.

En un intento por huir de sus captores una de las mujeres que se encontraba en un piso de Córdoba obligada a ejercer la prostitución, comunicó a su familia su ubicación a través del teléfono móvil. Sus familiares lo denunciaron a la Policía colombiana y ésta lo trasladó a la Policía Nacional. Inmediatamente los agentes desplegaron un dispositivo que finalizó con la detención de dos miembros de la organización y la liberación de la mujer que había logrado ponerse en contacto con su familia y de dos víctimas más, una de ellas menor de edad.

Tras las detenciones de Córdoba, los agentes localizaron varios pisos en Jaén en los que la organización continuaba lucrándose con las víctimas de trata. En total, la Policía Nacional ha detenido a siete personas, un español y seis colombianos, como presuntos autores de organización criminal, trata seres humanos, delitos relativos a la prostitución, favorecimiento de la inmigración clandestina y contra la salud publica.

En los cinco registros llevados a cabo, uno en Córdoba y cuatro en Jaén, se han intervenido 2.680 euros en efectivo, diversos teléfonos móviles, ordenadores portátiles, cuadernos con la contabilidad de la explotación, resguardos de envíos de dinero, material de sodomía y pequeñas cantidades de estupefacientes y marihuana.

Esta operación se enmarca dentro del Plan de la Policía Nacional contra la Trata de Seres Humanos con Fines de Explotación Sexual. El Comisario Principal de la Policía Nacional, José García Molina, ha recordado que estos delitos se pueden denunciar en el número de teléfono 900105090 y en el correo trata@policia.es. La comunicación es confidencial y no queda registrada la llamada, según ha puntualizado.

Violencia de género

Por otro lado, la Policía Nacional ha detenido a un hombre en Santa Cruz de Tenerife como presunto autor de un delito de malos tratos, después de que la víctima emitiera dos avisos de alerta en tres minutos a través de la aplicación gratuita para móviles Alertcops.

“Resaltar la actuación del policía nacional que recibió la alerta, quien tras intentar contactar con la mujer a través del chat sin obtener respuesta, consiguió hablar con ella por teléfono. En un primer momento, la víctima indicó que solo estaba probando la aplicación para ver si funcionaba, posiblemente producto del miedo que tenía, sin embargo, la profesionalidad y pericia del policía consiguió que la mujer admitiera que sufría malos tratos habituales”, ha explicado el Comisario Principal de la Policía Nacional.