Cunext Copper, Deoleo y Covap, entre las 30 mayores empresas en Andalucía
Las compañías cordobesas Cunext Copper, Deoleo y Covap forman parte del top 30 de las mayores empresas que desarrollan su actividad en Andalucía, según la edición de este año del ranking de las 1.200 mayores empresas en la comunidad autónoma, que ha presentado este lunes la revista Andalucía Económica.
Según concreta el ranking, Cunext Copper Industries ocupa el puesto número 12 en este listado, la productora de aceite de oliva Deoleo se sitúa en el puesto 27 y la Cooperativa del Valle de los Pedroches, el número 30.
El listado de las 1.200 mayores empresas en Andalucía lo lideran -del primer al tercer puesto- Cepsa, Endesa y Mercadona. A estas empresas les siguen la sociedad cooperativa andaluza Bidafarma en número cuatro y el Grupo Bidafarma en el cinco, seguidas de El Corte Inglés, Telefónica, la onubense Atlantic Cooper y la sevillana Abengoa.
Detrás están la internacional Airbus, con dos plantas en Sevilla capital y otras dos en la provincia de Cádiz; Acerinox, con una fábrica en Los Barrios (Cádiz); Cunext Copper Industries, en Córdoba; Grupo Cosentino, nacida en Cantoria (Almería); y la agroalimentaria de aceites Miguel Gallego (Migasa).
Otras empresas andaluzas en los primeros puestos son la rondeña Dcoop en el puesto 16, las granadinas Grupo Covirán en el 23 y Lactalis Puleva en el 24, la sevillana de energías renobables Grupo Prodiel en el 25, y las productoras de aceite de oliva Acesur, de Dos Hermanas (Sevilla), y Deoleo, de Córdoba, en los puestos 26 y 27 respectivamente.
También están la onubense Minas de Aguas Teñidas (Matsa) en el puesto 29, la fabricante de leche Covap, del Valle de los Pedroches de Córdoba, en el 30, y el Grupo Ezentis de telecomunicaciones en el 31.
Cuentas de las empresas
La revista autora del ranking, hecho con datos de 2019, ahonda en que la mejor forma de sacar conclusiones sobre el comportamiento de los distintos sectores productivos en particular y de la economía en general es analizar las cuentas de las empresas que los integran, algo que hacen con este documento cada año gracias a la colaboración de las sociedades que en él participan.
Respecto a 2020, apunta que las estimaciones del Ejecutivo regional son de una caída real del PIB del 10,4%, frente al crecimiento del 1,5% que se estimaba antes de la crisis. En la misma línea se posiciona la sociedad Analistas Económicos de Andalucía, que estima que el retroceso oscilará entre un 8,4% y un 11,5%, mientras que el Observatorio Económico de Andalucía prevé para el conjunto del año una contracción del PIB superior al 15%.
“Lo que de momento sabemos es que Andalucía cerró airosa la puerta de 2019”, apostilla la revista, que recuerda que entonces hubo un crecimiento del 2,1%, tres décimas menos que el ejercicio anterior, y que el comportamiento ha sido mejor que el registrado a nivel nacional (2%) y en la Eurozona (1,2%).
Por sectores
Sobre el crecimiento por sectores, Andalucía Económica constata que el sector primario se ha visto condicionado de forma negativa por el efecto de la sequía en 2019, que se intensificó tras el verano, y de los temporales de lluvias torrenciales de final de año. El olivar no ha permanecido ajeno a estos problemas, y aunque la producción final de aceite de oliva fue buena, llegando a las 1.461.045 toneladas, la caída de los precios en origen ha provocado una pérdida de valor.
No obstante, señala que “imbatible sigue siendo” la industria agroalimentaria, que aporta un 25% del empleo industrial, y que en estos últimos meses “ha sabido estar a la altura de la crisis sanitaria, lo que reafirma su liderazgo como uno de los sectores más potentes y dinámicos de Andalucía”.
Así pues, aunque no se han dado a conocer aún las cifras de producción de 2019, sí resalta que se exportaron productos por valor de 11.188 millones de euros, un 4,3% más que en 2018. Según fuentes oficiales, se trata del mejor registro histórico del sector desde que existen datos homologables (1995).
El sector de la construcción civil e inmobiliaria también sacó músculo el pasado ejercicio. Según la patronal Seopan, la licitación de obra pública sumó en Andalucía más de 2.491 millones de euros durante 2019, un 0,5% más que el ejercicio anterior. Además, en el mercado inmobiliario aumentaron cerca de un 15% las viviendas iniciadas y se terminaron un 32% más de viviendas respecto a 2018. Según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), Andalucía lideró en 2019 la compraventa de viviendas con 100.339 inmuebles, el 20% del total nacional.
A pesar de lo anterior, “el gran protagonista” de la economía andaluza sigue siendo el sector servicios, cuyo peso en el PIB ronda el 75%, y el baluarte de este sector terciario es el turismo, gracias a los 32,5 millones de personas que visitaron la región el año pasado. Su aportación al PIB supera los 22.000 millones de euros y emplea a unas 460.000 personas.
Lamentablemente, todo ha cambiado debido a la pandemia, y la revista traslada que la Junta de Andalucía considera que este año Andalucía dejará de percibir unos 6.000 millones de euros por la caída en picado del turismo. “Recordemos que este sector, junto a las exportaciones, formaron el tándem que consiguió reflotar la economía andaluza tras la crisis de 2008. Ahora es el turismo el que está con el agua al cuello luchando por no hundirse”, alertan los autores del ranking.
La situación es bien distinta en el sector exterior, que sigue mostrando un gran dinamismo. En 2019, Andalucía exportó productos y servicios por valor de 31.738 millones de euros, cifra que supone el segundo mejor registro histórico de la Comunidad y la consolida como segunda comunidad exportadora en España. Todo en un contexto internacional de notable incertidumbre y riesgos geopolíticos, derivados de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, de los riesgos asociados al Brexit y de la política arancelaria aplicada por Trump.
Concursos de acreedores
Por otro lado, la revista señala que Andalucía registró en 2019 un total de 447 empresas que se declararon en concurso de acreedores, lo que supone un 11,75% más que en 2018, y que según el INE, la cifra de deudores concursados asciende a 620. Si a las empresas se les unen las personas físicas acreedoras, un 7,5% más que en 2018 y la cifra más alta desde 2015, cuando los deudores concursados alcanzaron los 637.
Por actividad económica principal, de los 447 concursos declarados en empresas en Andalucía, 111 correspondieron al comercio, tanto al por mayor como al por menor, y vehículos; seguido por 60 empresas de la construcción, tanto de edificación y promoción inmobiliaria como del resto del sector; 20 empresas de energía y 27 empresas de hostelería. Otras 42 empresas pertenecen al sector de la industria, seis al de agricultura y pesca, 28 al de transporte y almacenamiento y diez al de información y comunicaciones.
También se sabe que de los 620 concursos registrados en Andalucía, 573 fueron voluntarios y 47 necesarios, mientras que, atendiendo a la clase de procedimiento, los ordinarios sumaron 164 procedimientos y los abreviados fueron 456.
Una de las empresas que el año pasado se declaró voluntariamente en concurso de acreedores fue la constructora cordobesa Grupo Prasa, tras intentar durante cuatro meses, sin éxito, llegar a un acuerdo con los acreedores.
La empresa ya había pasado antes por momentos delicados. Tras una mala racha en 2008 y 2009, en 2010 las empresas Mare Nostrum y Millurqui 2003 Invest solicitaron el concurso de acreedores para Prasa, que finalmente logró evitarlo tras una reestructuración del negocio, refinanciación de la deuda bancaria y la venta de parte de su sede central.
“Tampoco levanta cabeza la industria sevillana Ditecsa”, lamentan los autores del ranking, ya que presentó concurso de acreedores en diciembre de 2018 y consiguió quitarlo a mediados de 2019, pero ahora ha presentado un expediente de regulación de empleo (ERE) para el despido de 60 trabajadores en Andalucía, concretamente en los centros de trabajo de Sevilla y Huelva. La cifra de negocios que aporta (32,26 millones de euros frente a los 121,91 del anterior ejercicio) es la de la matriz, ya que ha vendido algunas filiales y ha desligado algunos negocios.
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