Cruz Roja atiende a casi un millar de personas que vive en asentamientos en Córdoba

Cruz Roja Española prestó, durante el pasado año, apoyo social en distintos asentamientos de inmigrantes de la provincia de Córdoba a un total de 950 personas.

En esos doce meses de 2017, el voluntariado de la institución humanitaria realizó salidas –algunas sólo de detección y otras de intervención o seguimiento- a campamentos situados tanto en la capital como en Adamuz, Montoro, Bujalance, Priego de Córdoba, Baena, Santaella y Rute.

En el marco de este proyecto -financiados por las Consejerías de Igualdad y Políticas Sociales y de Justicia e Interior-, Cruz Roja ofrece una atención socio-sanitaria a los inmigrantes y favorece su acercamiento a los recursos sociales normalizados; de hecho, en muchas ocasiones se les acompaña y se les asesora para la tramitación de documentos tales como el pasaporte, el NIE o la tarjeta sanitaria, así como para la inscripción en las oficinas del Servicio Andaluz de Empleo (SAE).

En este sentido, hay que destacar la colaboración entablada entre la institución humanitaria y el Servicio Andaluz de Salud, por la que profesionales de los centros de salud de la ciudad realizan tanto campañas de vacunación como de información y prevención, aprovechando la presencia en el asentamiento de Cruz Roja. A esto hay que sumar el acuerdo con la Unidad de Infecciosos del Hospital Universitario Reina Sofía para el seguimiento de personas que padecen tuberculosis.

Por su parte, el grupo sanitario conformado por voluntariado con formación específica en temas de salud hace visitas semanales a los campamentos, en las que lleva a cabo valoraciones y seguimientos, así como talleres de prevención y educación para la salud. En esta línea, la entidad también hace entrega cuando la situación lo requiere de medicamentos y artículos de parafarmacia.

De igual modo, en dichas visitas la organización les reparte material de ayuda humanitaria, entre el que se incluyen toldos, sacos de dormir, mantas, ropa y calzado, kits de higiene o productos materno-infantiles.

Asimismo, el personal de Cruz Roja distribuye, en sus visitas a estos campamentos, diversos alimentos básicos, como pasta, harina, atún, leche o tomate, que en momentos puntuales del año se acompañan de productos frescos, como carne, pescado o fruta.

Y es que la intervención que la entidad realiza desde hace años en los asentamientos de inmigrantes se ha ampliado y diversificado en los últimos años con la incorporación de cuestiones relacionadas con la prevención sanitaria, el género y los hábitos ocupacionales y educativos.

Mayoritariamente, los asentamientos de Córdoba están integrados por población rumana (831, el 87 por ciento del total) o marroquí (70) y, en menor medida, por ciudadanos de países subsaharianos o del Magreb.

Por sexos, son mayoría los hombres (645 frente a 305), mientras que en la distribución por edades la franja mayoritaria es la comprendida entre los 18 y los 65 años (722 personas), por un 23 por ciento de menores de 18 años (217) y una cifra residual de mayores de 65.

Este trabajo en los asentamientos, en el que colaboraron medio centenar de voluntarios y voluntarias a lo largo del pasado año, es sólo uno de los diversos proyectos que desarrolla la entidad dentro de su programa de atención a inmigrantes, cuyo objetivo general es hacer frente a las causas generadoras de vulnerabilidad en la población extranjera, al tiempo que se le proporciona toda la ayuda necesaria para llevar una vida digna y lograr su plena integración en la sociedad de acogida.