Víctor Morillo, desequilibrio para cerrar la plantilla lucentina

Cerrado. Las incorporaciones en el mercado veraniego se están haciendo más de rogar que de costumbre debido al retraso de las competiciones. De hecho, varias plantillas siguen reformándose a tan solo tres semanas del inicio liguero, en cambio hay otras que tienen el trabajo muy adelantado. El Ciudad de Lucena ha realizado una reestructuración total de la plantilla, aunque ha querido renovar el esqueleto usado en la anterior campaña por su técnico Dimas Carrasco. Sin embargo, los resultados cosechados durante el curso pasado ha hecho que varias piezas clave del conjunto lucentino se hayan marchado a clubes de superior categoría como es el caso de Luismi Redondo al Córdoba, pero las aspiraciones del club no son otras que ascender este año y han anunciado la incorporación de Víctor Morillo. El ursaonense de 23 años ya ha pasado por las canteras de Sevilla, Granada y Cádiz, pudiendo debutar en Segunda División con este último club.

Morillo es un fichaje que puede dar ese rendimiento necesario y que tendrá que hacer olvidar tanto a Erik como a Luismi, aunque, a priori, tiene capacidad para ello. El sevillano es “un jugador de calidad y su mejor virtud es la polivalencia” ya que “puede jugar tanto por fuera como por dentro”, además de que “se asocia de maravilla porque conoce muy bien el juego, lo que le permite asistir en un brillante último pase”, reza un comunicado del club que apunta que el mediocentro “tiene un guante en su pierna izquierda” por lo que “puede llegar a centrar, asistir o golpear con una calidad y potencia que le permite contribuir siempre en la faceta anotadora del equipo”.

Y es que la dirección deportiva está realizando un buen papel. De hecho, el Ciudad de Lucena ya ha anunciado un total de doce incorporaciones de cara a una nueva temporada en Tercera División. Aunque el mercado en esta categoría no cierra hasta el mes de enero, el conjunto lucentino ya da por clausurado el plantel a la espera de un posible último fichaje que de un salto de calidad a la plantilla. Por tanto, la entidad aracelitana ha conseguido vestir de celeste a Víctor Morillo, Adrián Ruiz, Pablo Molina, Álex Lázaro, Luciano Pierce, Guille Roldán, Álvaro Pérez, Adri Soto, Mario Sánchez, Nacho, Michael y Juan Delgado; mientras que ha renovado a Maero, Toni Pérez, Zurdo, Mario Ruiz y Pablo Gallardo. Una reestructuración que ha dejado muy buen nivel a la escuadra lucentina, aunque ya todo depende del rendimiento que los chicos de Dimas Carrasco puedan dar sobre el verde.