Miquel y Guerra, los últimos pasajeros blanquiverdes

El Córdoba viaja en dirección al Cerro del Espino para realizar el último entrenamiento de la semana con dos canteranos que debutan en la expedición

El convoy cordobesista viaja en estos momentos con destino Madrid. El equipo de Esnáider, que ha partido en autobús con dieciocho jugadores, cuenta por primera vez en su expedición con dos nuevos futbolistas de la cantera, Manuel Miquel y Juan Guerra. ¿El motivo? “Porque me han gustado”, refirió ayer Esnáider.

Lo cierto es que, más allá de especulaciones, la selección de otros dos integrantes del filial dice mucho de la escuela cordobesista. En lo que va de año más de media docena de hombres han participado de manera activa en las sesiones preparatorias que se han desarrollado durante el campeonato.

Si de algo puede estar orgullosa la afición es de sostener con apenas recursos a un equipo B que nó solo emana la ilusión propia de quienes aspiran a ser futbolistas, sino que además demuestra que ya de por sí lo son. Porque la trayectoria del filial, que padece los impedimientos propios de la escased de infraestructura e incluso de falta de recursos económicos, es digna de mención.

Miquel y Guerra son sólo un ejemplo de lo que puede dar de sí dicho filial. En el B también están los Seoane, Cruz, Sillero, Mane, López... En realidad, un auténtico equipazo constituido por jóvenes con proyección que quizá algún día, más pronto que tarde, formen parte de un primer equipo donde los últimos pasajeros lideren un plantel meramente blanquiverde.