El Córdoba, como en casa en Reus

Con los cánticos de siempre, pero entonados con más fuerza que nunca. Los aficionados blanquiverdes recibieron al Córdoba con calor a las puertas del Estadio Municipal de Reus, donde afrontan una verdadera final por la salvación de la categoría. Cuatro autobuses desplazados desde la ciudad califal llegaron poco antes a las inmediaciones del recinto catalán. A sus ocupantes, casi doscientos, se unieron miembros de la Peña Sangre Blanquiverde, afincada en Cataluña. También se dejó sentir el aliento de muchos cordobeses y andaluces que acudieron a la llamada del club para apoyar en un partido clave para sus aspiraciones de permanencia en la Segunda División.

La hinchada blanquiverde aclamó a todos los futbolistas cuando bajaron del autobús, especialmente a jugadores como Reyes o Guardiola, que regresó este mediodía a Barcelona después de un viaje relámpago para asistir al nacimiento de su primera hija. Los gestos de rabia de José Ramón Sandoval, clásicos en los prolegómenos de todos los partidos, han puesto el primer capítulo del partido más importante de cuantos ha disputado hasta el momento el conjunto blanquiverde. Es la última salida del curso, el viaje final para una caravana de valientes que espera regresar a casa con un deseo cumplido: tener a su equipo, después de siete meses, fuera de las posiciones de descenso.