Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

Córdoba CF
Las dudas que se ciernen sobre Primera RFEF

Luis Rubiales, durante un acto de la Real Federación Española de Fútbol

Alejandro Jiménez

0

Una vez la temporada en Primera RFEF va llegando a su fin, toca fijar las miradas en la próxima temporada, y un mar de dudas se cierne sobre la principal categoría que rige la Real Federación de Fútbol Español. La televisión, el control económico y la división de los grupos son solo las dudas más fehacientes que tiene encima de la mesa el organismo federativo para la próxima temporada, con la viabilidad económica de la categoría como tema candente y permanente, así como con la amenaza de volver al antiguo sistema de Segunda División B también siempre presente como medida de presión hacia los clubes.

Y es que, si hay algo claro, es que cambios va a haber en la próxima temporada. El principal y más claro será el de la televisión. Pese a que InStat -a través de su OTT, InSports TV- adquirió los derechos de retransmisión de Primera RFEF por tres temporadas, finalmente, el contrato se ha resuelto al término del primer año. Pese a que la Federación ofreció el tender televisivo, en un principio, por un precio total de 15 millones de euros, la empresa irlandesa, según informó 2PlayBook, desembolsó, además de cuatro millones más por los derechos en sí, poco más de dos millones de euros más en concepto de producción. Así, asumiendo esos dos millones de euros, la RFEF se garantizaba el 80% de los beneficios generados por la retransmisión de la categoría, mientras que el 20% irían a parar a InStat. Las previsiones de la RFEF eran de recibir un mínimo de cinco millones de euros pero, finalmente, tras lograr tan solo 28.000 suscriptores, los beneficios no alcanzaron ni la mitad de lo esperado.

Ante esta situación, InStat y RFEF decidieron separar sus caminos y, de esta manera, la Federación ya ha sacado un nuevo tender televisivo en busca de una operadora que se haga cargo de la retransmisión de la tercera categoría del fútbol español. Pese a que en un principio, el ente presidido por Luis Rubiales pedía quince millones de euros por los derechos televisivos, recientemente se ha sabido que las pretensiones han bajado hasta los siete millones de euros, menos de la mitad de la cantidad esperada. A partir de ese precio, la RFEF negociará con las empresas que se presenten, entre las que estará de nuevo InSports TV, en busca de un acuerdo que sea lucrativo para todas las partes y logre elevar los beneficios de todos los equipos que componen la categoría de plata, de manera que la categoría comience a ser menos deficitaria para los equipos que compiten en ella.

Un control económico siguiendo el modelo UEFA

Y es que, precisamente, la viabilidad económica de los equipos es otro de los grandes dolores de cabeza que atormentan a la Real Federación Española de Fútbol. Por poner un ejemplo cercano, el Córdoba CF, en la última campaña, cerró las cuentas con un déficit de 2,7 millones de euros. Una cantidad difícilmente asumible en el tiempo, y que, en parte, viene provocada por la escasa capacidad de generar ingresos en una categoría como la Primera RFEF. Pese a ello, la entidad blanquiverde, según anunció en la rueda de prensa de despedida de Javier González Calvo, ingresa cerca de los dos millones de euros por temporada, siendo uno de los equipos punteros en este sentido.

Es por ello que, en una reunión acontecida a principios de año en el Salón de Actos Luis Aragonés de la Ciudad del Fútbol de Las Rozas entre los presidentes de todos los clubes que componen la Primera RFEF y la propia RFEF, se acordó implementar en la categoría un control económico en busca de reducir estas situaciones de déficit en los equipos. Según anunció la Federación, esta medida “pretende favorecer la sostenibilidad y el equilibrio en la gestión de los equipos que forman parte de una categoría moderna, espectacular y cada vez más seguida por los aficionados”. Aún está por definir cómo se implantará este control económico, pero según adelantó Marca, seguirá el modelo UEFA. Esto significa que los clubes podrán gastar el 70% de lo ingresado, pero de una manera gradual. Es decir, el primer año podría ser el 90%, el segundo el 80%, y en el tercer año se reduciría hasta el 70%.

Además de ello, los cuarenta clubes que compiten en la Primera RFEF tendrán que participar en el tender televisivo mencionado con anterioridad. Conscientes de que los derechos televisivos resultan fundamentales para la sostenibilidad de la categoría y que un aumento de los ingresos supondría una mejor salud económica de todas las entidades, serán los propios equipos los que tendrán que moverse de cara a buscar posibles ofertas por estos derechos televisivos, aunque aún está por confirmarse de qué manera seguirá este proceso la Real Federación Española de Fútbol.

A vueltas con la división de grupos

Por último, la tercera gran duda que se cierne sobre la categoría de bronce es la del reparto de equipos en los dos grupos que compondrán la categoría el próximo año. Pese a que la RFEF amagó en varias ocasiones con volver al antiguo sistema de Segunda División B, todo hace indicar que nada cambiará y que la próxima temporada, la Primera RFEF mantendrá el mismo formato visto durante los últimos dos años. De hecho, el pasado 26 de mayo, la propia RFEF sacaba pecho en su web sobre el éxito de este nuevo formato, destacando la “competitividad y emoción” que ha traído consigo la reestructuración acometida en la temporada 2020-21.

Así, manteniendo estos dos grupos, en la primera temporada de la categoría de bronce, la división se realizó trazando una línea imaginaria desde el suroeste hasta el noroeste, dejando así en el Grupo I a los equipos de Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, Navarra, La Rioja, Castilla y León, Extremadura, Castilla-La Mancha -excepto Albacete- y Madrid -excepto Real Madrid Castilla-, mientras que el Grupo II lo formaban los clubes de Aragón, Cataluña, Baleares, Comunidad Valenciana, Murcia, Canarias, Andalucía, Ceuta, Melilla, y Real Madrid Castilla. Por otro lado, en esta última temporada, esa línea ha pasado a trazarse desde el noroeste hasta el sureste, moviendo a los equipos de País Vasco, Navarra, La Rioja y Soria al Grupo II, mientras que Real Madrid Castilla, Albacete, y los equipos de Andalucía, Canarias, Ceuta y Melilla pasaban al Grupo I.

Sin embargo, ahora serán los clubes los que vuelvan a decidir qué división se establecerá en la categoría para esta nueva temporada 2023-24. La posibilidad de mantener la división de este pasado año sigue estando presente, aunque también se ha pedido en repetidas ocasiones un reparto de grupos entre norte y sur, hecho que facilitaría los desplazamientos de las propias entidades, reduciendo así el gasto en transportes de los clubes. Todo dependerá de cómo se componga finalmente la categoría, que está a la espera de conocer los últimos once participantes que saldrán de los play offs de ascenso tanto a Segunda División, como desde Segunda RFEF.

Etiquetas
stats