Córdoba CF — Rival

Atrevimiento y descaro para una Balona que busca asaltar El Arcángel

Afirmaba Germán Crespo en la rueda de prensa previa al encuentro que no hay rival fácil en esta Primera RFEF. Todos los equipos se encuentran ya en un punto de madurez óptimo para desarrollar su juego, y el tiempo apremia cada vez más, por lo que la necesidad de sacar resultados positivos es cada vez mayor, y los equipos de la zona aja de la tabla cada vez aprietan más a los líderes en busca de sumar y evadir los puestos de descenso. Justo en esa dicotomía se encuentra una Real Balompédica Linense que, desde la llegada de Rafa Escobar a su banquillo, ha logrado revertir su dinámica y reaccionar para escapar de la parte baja, acercándose cada vez más a la zona media de la clasificación.

Y es que el inicio de la Balona no fue para nada bueno. Aún con Alberto Jiménez Monteagudo al mando del navío albinegro, el equipo de La Línea no logró vencer en ninguno de sus ocho primeros encuentros, cayendo contra el RC Deportivo de la Coruña, la AD Alcorcón, el San Fernando CD y la UD Sanse, y empatando ante Real Madrid Castilla, AD Mérida, Pontevedra y Celta B, sumando así cuatro puntos de 24 posibles, hecho que acabó por costarle el puesto al técnico albaceteño. Su relevo se encontraría en territorio cordobés, pues sería Rafa Escobar su sustituto. Un relevo que cambió por completo la cara al equipo y que consiguió hacer despertar a uno de los nombres más históricos de la categoría.

Con la llegada de Escobar al banquillo de la Real Balompédica Linense llegó la primera victoria del curso, en la jornada nueve de competición, ante un CD Badajoz inoperante y que acabó cayendo por 0-2. Sería el inicio de una buena dinámica para la Balona, que también vencería la siguiente jornada a la Cultural Leonesa y que, pese a caer ante el Linares Deportivo en Linarejos, volvería a la senda victorias imponiéndose al Racing de Ferrol en su feudo. El equipo comenzaba a despertar y, tras empatar contra el Talavera, volvería a vencer, esta vez ante el colista, la AD Ceuta. Tan solo el tropiezo en su visita a Algeciras rompería de nuevo la dinámica, pero el equipo, con nueva cara, se recompondría y, luego de empatar en su visita al Rayo Majadahonda, volvería a vencer en el último duelo previo al encuentro ante el Córdoba CF, ante un Fuenlabrada que se desinfla y que cedió su decimotercer puesto al conjunto de Escobar.

Y es que la plantilla que tiene la Real Balompédica Linense es para aspirar a grandes cotas en este Grupo I de la Primera RFEF. Excordobesistas como Víctor Mena, Omar Perdomo o Fran Morante militan en las filas de Escobar, contando con una amplia presencia de la provincia. Además de ello, la calidad desborda por los cuatro costados, y cuenta con jugadores de la talla de Yassin Fekir, Koroma, Masllorens o João Pedro, que prometen poner en peligro la zaga califal. La zaga tampoco se queda atrás, habiendo encajado tan solo quince tantos en los diecisiete encuentros disputados -uno menos que el Córdoba CF-, concediendo así un tanto menos que la escuadra de Germán Crespo.

Alhassan Koroma, viejo conocido de la hinchada blanquiverde -fue el autor de los dos tantos de aquella derrota del Córdoba CF ante la Balona en El Arcángel que acabó por dinamitar las opciones de ascenso del club califal- es el máximo artillero del equipo con dos tantos, aunque la labor de anotar goles se encuentra muy repartida, con hasta cuatro futbolistas en esa cifra: Álex Guti, Toni García, Antonio Romero y Fran Morante acompañan al de Sierra Leona en la tabla de pichichis. Haciendo especial énfasis en el balón parado, Rafa Escobar ha apostado de manera habitual por el tradicional 1-4-2-3-1, con Alberto Varo como portero titular; Loren y Ruane como laterales, y Fran Morante junto a Jesús Muñoz en el centro de la zaga. Formando el doble pivote, Borja López y Antonio Romero son los más habituales, aunque Masllorens también suele participar, junto con Fekir haciendo las labores de enganche. Por último, en la punta de ataque, un tridente endiablado, con Koroma, Álex Guti y Omar Perdomo alternándose en las bandas, y Nacho Heras y João Pedro haciendo lo propio en el puesto de delantero.